La próxima temporada Jesús Gámez jugará con casi total probabilidad en el Sevilla y Lolo y Duda lo harán en el Málaga. A día de hoy el acuerdo entre las dos entidades andaluzas es total. El trueque de jugadores está cerrado en un principio sin compensaciones económicas, el Sevilla y Gámez están también de acuerdo y el Málaga y Lolo, ídem de lo mismo. Pero no ocurre igual con Duda. El portugués, el hombre que más claro ha tenido según sus propias declaraciones que jugaría en el Málaga desde hace varios días, dice ahora que no todo está tan claro. Eso es lo que falta y ayer el propio Lolo daba por hecha la sintonía entre clubes.

"Por lo visto Sevilla y Málaga han llegado a un acuerdo para hacer un intercambio de jugadores, si yo entro en la operación estoy encantado. Si beneficia a las dos partes se hará y se llevará a cabo. El Sevilla quiere contar con Jesús Gámez y el Málaga está muy interesado en mí y donde estemos mejor las dos partes, allí estaremos. Ahora habrá que ver las opciones que nos ofrecen a nosotros", comentaba el onubense, que tiene un contrato acordado de tres años con el Málaga y quien admitió, por otro lado, que en el Sevilla lo iba a tener difícil: "El club en ningún momento me ha garantizado que vaya a formar parte de la primera plantilla y si el Málaga está tan interesado habrá que darle también su opción", apuntando que ha hablado con Jiménez. Según Lolo, el técnico "tiene ganas de que esté aquí, pero el club tiene otras pretensiones y habrá que aceptarlas".

Seguidamente, el canterano pronunció unas palabras que suenan a despedida, aunque aún habrá que esperar. "Sólo tengo palabras de agradecimiento al Sevilla, soy sevillista y mientras no haya novedades no hay nada que decir", subrayó.

Mientras, todo está pendiente de Duda, aunque no será hasta el lunes cuando se retome todo. El portugués tiene dos ofertas del exterior (del Colonia y del Olympiacos) que quiere utilizar para presionar al Málaga, con quien ya apalabró un contrato hace varias semanas. Al parecer, Duda habló con Fernando Sanz de una ficha de un millón de euros anuales y las diferencias se encuentran ahora en si esta cantidad sería en bruto o en neto. El extremo zurdo está muy a gusto en La Rosaleda y nadie duda en que habrá final feliz.