Directivos y ex futbolistas del Athletic y de todo el fútbol nacional no dieron crédito el lunes por la tarde cuando cayeron en la cuenta de que el Betis no había enviado representación oficial alguna al entierro de Eusebio Ríos, quien fuese futbolista, entrenador y secretario técnico de su entidad durante muchísimos años.

El espigado defensa de Portugalete falleció en su ciudad natal el sábado de un infarto en el ascensor de su casa cuando regresaba de un homenaje que le habían ofrecido en la vecina Galdácano y, el domingo, ya en el club verdiblanco no había intención alguna de enviar una representación oficial, como así fue.

El Betis se limitó a hablar con la viuda de Eusebio Ríos por teléfono y a enviarle una corona de flores, aunque, por fortuna, sí estuvo representado y no sólo por Roberto, el hijo del fallecido. Numerosos jugadores de la época en la que Eusebio fue secretario técnico de la entidad acudieron, como Gordillo, Stosic, José Mari, Jaro, Sabas, Márquez, Josete, etcétera. También acudió el hijo de Pedro Buenaventura, quien incluso portó el féretro con Eusebio Ríos amortajado con una camiseta verdiblanca de su hijo Roberto.

Paralelamente, el afamado aficionado verdiblanco Rogelio Gómez Trifón, propietario del establecimiento La Flor de Toranzo, organizó una misa en la capilla del Baratillo en memoria de Ríos con el consentimiento de su familia. La misma tendrá lugar el próximo lunes, 19 de mayo (21:00), en el Baratillo. El club verdiblanco, al conocer la noticia, reaccionó rápidamente y organizó otra misa para el 22 de mayo (20:30) en la iglesia del Corpus Christi.

Horas después, la familia Ríos-Patus anunció una tercera misa para el 20 de mayo (21:00) en la parroquia del Sagrario de la Catedral, en un comunicado en el que agradeció todas las muestras de condolencia recibidas.