Un Soderinsa Rinconada en racha afronta un partido trascendental para sus intereses. Los pupilos de Antonio Rueda se la juegan mañana (17:30) ante el vigente campeón de la División de Honor de bádminton, el CB Oviedo, al que visitarán en su último partido del Top 8 de la Liga Nacional y que precisamente los privó el pasado abril de levantar el título al adjudicarse el encuentro de vuelta con un inesperado 5-2.

Los rinconeros viajarán a la capital de Asturias con la obligación de vencer para no dejar escapar la segunda posición que actualmente ocupan -empatados a puntos (27) con el Oviedo-, única vía de acceso para disputar la gran final del campeonato, dado que el primer puesto lo ocupa de forma destacada su eterno rival, el Recreativo IES La Orden.

Sin lugar a dudas, se trata del duelo más importante de todos cuanto ha disputado en lo que va de temporada el Soderinsa, obligado a ganar para no dejar escapar su sueño de levantar el trofeo de campeón, el cual se le resiste desde hace tres años.

Si bien es cierto que el cuadro sevillano se impuso con solvencia al ovetense en el partido de ida disputado en el Fernando Martín (7-0), un arranque irregular y la derrota en segunda vuelta ante La Orden (5-2) han propiciado que el Rinconada no pueda permitirse un respiro, a diferencia de lo acontecido en campañas anteriores, en las que su clasificación para las semifinales era incuestionable antes siquiera de finalizar la liga regular.

Lejos de dejarse arrastrar por la presión, la plantilla rinconera afirma estar más motivada que nunca, y así lo ha demostrado esta última semana. Eso sí, su entrenador ha preferido no sobrecargar a sus pupilos: "Lo que más me importa es que descansen y vayan al partido en las mejores condiciones posibles".