Hughes vuelve a decidir una nueva victoria del Betis Baloncesto (68-78)
Los verdiblancos, cuartos en solitario, superan al Alimerka Oviedo con una formidable actuación del americano, que facilitó el rescate bético cuando los carbayones se envalentonaron en el tercer cuarto reduciendo hasta los 4 puntos la máxima de 16
El formidable estado del estadounidense, convertido en tónica habitual

El Betis Baloncesto aumentó este domingo sus créditos en Pumarín y logra tras su triunfo ante Alimerka Oviedo (68-78) mantener la ligera ventaja por la cuarta plaza en Primera FEB con respecto a Palencia que se había granjeado durante este extenuador ciclo de tres partidos en ocho días. La frescura y determinación ofensiva de Mark Hughes (28 puntos y 6 de 8 en triples) volvieron a servir de auxilio a la tropa de García de Vitoria, que se encontró con una sensible tesitura en el tercer cuarto al hacer aguas en canasta propia. La errática impulsividad del cuadro carbayón y la pobre cifra desde la línea de tiro libre (13 de 25) dejaron sin opciones en el tramo final a los de Javi Rodríguez.
Inició el encuentro a la carrera, a toda velocidad, como promete regularmente la caldera de Pumarín. De Bisschop formaba en el pívot y a su lado, de cuatro, Kasibabu, que abrió el conteo en el primerísimo sorbo al encuentro, tras el salto inicial. Renfroe, pillo como él sólo, se hacía con el balón pos lucha aérea y lo mandaba de nuevo al aire con sutileza para brindar un alley oop para que facturara el congoleño. Ya estaba encendida la mecha. Las posesiones eran fugaces, de cinco segundos máximo, y el ritmo frenético conllevaba una constante apoderación del cansancio.
La propuesta defensiva de los carbayones se basaba en exigir al máximo al corto roster de García de Vitoria, sin Radoncic, cumpliendo el último de los tres partidos de sanción y sin Álex Suárez en condiciones adecuadas por su estado físico. Dispondrá el balear de este parón por las Ventanas FIBA para recuperarse. A los cinco minutos el Betis Baloncesto ya había reconfigurado casi por completo su quinteto. Sólo Hughes se matenía. Simbólico, lejos quedó lo de ser sexto hombre.
A esa intensidad en tareas defensivas se la atribuían una natural y casi irremediable carga de faltas. Mikel Sanz, responsable de los dos triples encestados de los ovetenses en el primer cuarto, debía marcharse enseguida al banco con dos en su haber. Un ligero acierto en el tiro de los verdiblancos y los errores desde la zona de tiros libres determinaban la victoria parcial de los hispalenses en los primeros diez minutos (15-23).
En clara línea ascendente y con notorio papel en las dos canastas, Tunde se hacía de oro en los primeros minutos del segundo cuarto. Ponía la máxima hasta el momento con un mate (17-27). Acto seguido Valinotti daba aire a los suyos desde el triple (20-27). Se negaba a soltarlo el bloque de Javi Rodríguez, que tras tres victorias seguidas miraba con atrevimiento al play off y confíaba en un triunfo ante los verdiblancos en la cuarta oportunidad esta temporada: dos de ellas en los cuartos de final de la Copa España, la otra en la primera vuelta en San Pablo.
La acelerada revolución en la pista dejó de serlo hasta que Renfroe puso su temple al servicio de sus compañeros. Benite se aprovechaba del momento de aplomo del choque y la renta máxima volvía a subir, esta vez hasta los 11 puntos. Lo abordó el técnico local con tiempo muerto (25-36). Desgastado, les salpicaba el plan de partido a los ovetenses. El brasileño castigó aún más a su rival desde la larga distancia (25-41), brecha máxima del encuentro. No obstante, Cosialls y Mikel Sanz maquillaban el electrónico antes de enfilar los vestuarios (31-41), pues los colegiados no señalaron como válida una canasta de Langarita. Fuera de tiempo, la repetición no dejaba lugar a dudas pese a las incendiadas protestas de los asistentes a Pumarín.
El tercer cuarto encendió las alarmas
Se reanudó el duelo en el corazón de Asturias con dos buenas acciones, una para cada lado. Hughes apretaba las tuercas con otros tres puntos y Nweke la hundía con facilidad en una buen jugada trenzada entre los directores del juego azules. Era un aviso para los verdiblancos, con expesura defensiva y con excesivas precipitaciones en la construcción por entonces.
Cvetkovic al banquillo por Renfroe era la sensata manera del entrenador del Betis Baloncesto de volver más dócil el partido (42-48). Y no funcionaba del todo ya que los carbayones seguían rosigando la diferencia hasta el 47-51. Valinotti, enchufado, desactivaba la zona 2-3 de García de Vitoria, al que no le surtía de manera positiva ninguna de sus decisiones tácticas. Claramente se percibían los peores momentos del Betis Baloncesto, que tuvieron que recurrir por enésima vez a la muñeca ardiendo de Hughes. Dos triples casi seguidos -21 puntos de los 28 con los que acabaría-, el segundo de ellos previo a una pícara sonrisa que despedía el tercer cuarto (56-61).
Y el cabreo de Javi Rodríguez iba a ir a más. Hughes era ya inevitable desde el perímetro. Qué jugador más determinante. (56-67). Fue el estadounidense el cloroformo del partido. El desatino de ambas plantillas durmió la anotación. No quería meterse en líos el Betis Baloncesto, en bonus al igual que su rival, y dejó pasar la corriente hasta que el partido muriera. A falta de 2:38 para la conclusión, seis puntos había acumulado Alimerka Oviedo en el cuarto decisivo... aunque tampoco era de mayor lustre la anotación visiante (64-72).
También te puede interesar
Lo último
La 6º jornada de la Copa COVAP se desarrollará en el municipio sevillano, de donde saldrán los equipos que representarán a Sevilla en la Fase Final los próximos 5 y 6 de abril