Osasuna | betis · informe técnico

Una columna vertebral de roca

  • Casto contagió su aplomo, Melli se ensambló con Juanito y en la medular, los apoyos y la disciplina terminaron de soldar al equipo · Asegurada la zona de atrás, Mark González firmó la efectividad arriba

El pragmatismo vistió de verde y blanco en la gélida tarde pamplonesa para que el Betis lo vea todo mucho más claro que tras la negrísima noche del botellazo. Se juramentaron los once béticos para reaccionar tras el duro revés que sufrió en los despachos, y con un ejercicio de firmeza y eficacia se llevaron los tres puntos ante un rival neutralizado por la red que ordenó Paco Chaparro.

La columna vertebral del Betis cimentó la victoria de oro. Aseguró el cero en su portería con la respuesta de Casto, el dominio de Melli y Juanito en su área y el mayor dinamismo de Arzu, Rivera y Capi ante el veterano Puñal y el pesadote Javi García. Y arriba, se trataba de cazar alguna. Lo hizo Mark González a balón parado. Implicación colectiva, firmeza atrás, efectividad arriba, y los tres puntos para Sevilla. Ya habrá tiempo para jugar bonito.

Defensa

Volvía Ilic en lugar de Damià en el costado derecho de la defensa. Y el esloveno volvió a exhibir su habitual fragilidad para guarecer su espalda. Delporte, con la ayuda de Plasil desde la mediapunta, le buscó las cosquillas y se las encontró, pero el francés se lesionó a los 20 minutos. Ziganda cambió el 4-2-3-1 por un 4-4-2 al dar entrada a Portillo y reubicar a Plasil en el extremo izquierdo, pero Osasuna no carburó. Con ese cambio, los rojillos perdieron presencia por dentro y los béticos ganaron poco a poco el pulso en el centro del campo. La zaga verdiblanca lo agradeció.

Ilic no fue la única novedad en la alineación de Chaparro. Casto relevó al lesionado Ricardo y Melli regresó al eje de la zaga. Y estas dos aportaciones sí que dieron firmeza. El central barbateño secundó a Juanito en los despejes y anticipaciones en el área, y cuando Osasuna arriesgó al todo o nada en el último cuarto de hora, Casto apareció con su determinación en las salidas, su colocación y sus blocajes.

Chaparro vio que Osasuna apelaría al fútbol directo, colgando balones para cazar algún rechace o rebote, y dispuso en ese cuarto de hora final un 5-4-1 con Lima metido entre los centrales.

Ataque

Cuando Capi ejerce más de tercer medio centro que de enganche, el juego de ataque del Betis queda un tanto inconexo, sin salidas claras. Fue lo que le ocurrió al equipo ayer. Los tres medios restaron con eficacia, pero apenas sumaron. Ni Capi ni Rivera se proyectaron con decisión, más afanados en labores de contención, y los extremos también trabajaron mucho sin la pelota. Había que ser pacientes, aguardar alguna recuperación y aprovechar un error de Osasuna.

Chaparro trató de sacudir el árbol a ver si caía algo y ordenó que Edu y Mark González jugaran durante un tiempo a pierna cambiada, pero tampoco hubo profundidad.

Esa paciencia halló la primera ocasión en el minuto 31, con un desmarque de Pavone por la zona izquierda, un pase en profundidad de Mark González y un remate forzado del argentino. La segunda ocasión llegó a balón parado al inicio de la segunda parte, y Mark González la aprovechó con su golpeo. La eficacia fue un hecho: gol al segundo intento, y a defender con todo.

Virtudes

La columna vertebral, sólida cuando Osasuna tuvo la pelota.

Talón de aquiles

El inconveniente de taparse atrás: la salida en ataque se limita.

Comentar

0 Comentarios

    Más comentarios