Se retoca el morro, se cambia el ángulo del alerón, se juega con la presión de los neumáticos, se tiene fe en que la última idea aerodinámica sea la acertada. La Fórmula 1 apura su pretemporada con la última sesión de prácticas en Barcelona a partir de hoy. Se buscan las décimas que faltan. Después, sólo quedará la recta final al Mundial, el 16 de marzo. Serán tres días de actividad frenética en Barcelona, en los que habrá que comprobar sobre el asfalto, en tiempo y espacio reales, las ideas de los ingenieros, mecánicos, pilotos y computadoras.

Sólo faltará Williams, uno de los equipos revelación de la pretemporada. Del resto, nadie se perderá el ensayo general. Ferrari pondrá sobre la pista a Raikkonen, el campeón del mundo; McLaren-Mercedes hará lo propio con Hamilton, el subcampeón. Y en Renault, Alonso buscará motivos para creer que el 16 de marzo en Melbourne puede estar cerca de los otros dos. Los tres coincidirán tras muchas semanas controlándose en la distancia.

"La lluvia de esta semana obliga a que durante los tres días haya un programa muy intenso, y los miembros del equipo nos han pedido que limitemos al máximo todo tipo de actividades", aseguró una portavoz de Renault.

La escudería gala es la que tiene más trabajo por delante. "Estamos bastante atrás. No estamos en condiciones de luchar por nada importante", alertó Alonso el martes al verse lejos de Ferrari, McLaren e incluso BMW.

Quien más necesitado está de conseguir unas décimas es Alonso. Por eso, las dos jornadas de lluvia, el martes y miércoles, fueron un revés para la escudería francesa y el bicampeón mundial español. Barcelona despejará la incógnita del estado del R28, que es de esperar que esté lejos de los tres equipos punteros.