Tan mal construida como mal gestionada

La manera en que llegan las derrotas señalan ya a Manzano con el peso de alguna parte importante de la responsabilidad

Kanoute se desespera y mira con mala cara a un punto indefinido; Romaric aparece difuminado.
Kanoute se desespera y mira con mala cara a un punto indefinido; Romaric aparece difuminado.
Jesús Alba / Sevilla

12 de diciembre 2010 - 05:02

El mismo modelo, reiterativamente perdedor ante el equipo que sea, está llevando a Gregorio Manzano a la primera línea de fuego. El jiennense aporta poco y calla mucho. Lo mismo tapa a sus futbolistas ante un escándalo -totalmente loable y hasta obligado- que les echa públicamente la culpa de una derrota con una bronca ante las cámaras. Pero a la hora de la verdad, a la hora de buscar soluciones futbolísticas en una plantilla que, todo hay que decirlo, tiene carencias, su balance de acierto es cero. Se le trajo para eso, para buscar soluciones, pero parece más interesado en ir colocándose y proyectando la temporada que viene y dejar pasar ésta bajo el paraguas del discurso ventajista de que la plantilla se hizo antes de su llegada.

Ante el Almería, otra exhibición de lo mismo. Empeño en matar a Kanoute, en sacarlo de su zona y obligarlo; empeño en confiar en dos puntas estáticos; empeño en creer en Renato y ahora en Zokora; empeño en no intentarlo siquiera y no buscar debajo de las piedras, en la plantilla de profesionales o en la cantera, que en época de crisis ya se sabe que es la mejor fórmula...

Defensa

No hay mucho más que hablar de lo que ya estaba dicho. No es excusa que el primer gol no entrara. Zokora es un desastre táctico y Renato poco le puede ayudar. Las bandas, juegue quien juegue en ellas, se abren tanto que dejan muchísimos metros en manos del rival. El entrenador no cambia nada, no intenta nada. No cambia de sistema, se limita a dejar pasar los minutos, nadie muerde en el centro del campo y los centrales tienen que ir a todas.

Ataque

El modelo de los dos delanteros altos, las bandas y el 4-4-2 está agotado. Ningún equipo del mundo juega así y era un error que cometía Antonio Álvarez y que algunos pensaban que iba a corregir Manzano. Para que ese patrón funcione tienen que darse varias situaciones y ninguna se da. Primero, Kanoute tiene que hacer de pegamento y el franco-malí está perdido porque no sabe si tiene que atacar o defender. Las bandas tienen que tener apoyo y no lo ofrecen y, sobre todo, tienen que soportar al equipo dos medios centro fuertes en el eje, de lo que no se tienen noticias por Nervión desde hace muchísimo tiempo.

virtudes

Las ganas de Capel.

talón de aquiles

Las sensaciones son muy malas, pero en las derrotas y -tirando de memoria- también en las victorias, que es lo más grave. Mirar atrás además es peligroso porque algunos pueden tirarse del barco.

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