Fuenlabrada-CB Sevilla

Otra vez la pata en el fango (82-81)

  • El efecto Casimiro se diluye con una derrota ante un rival directo que puede pasar factura

La ilusión y la esperanza se desbordaron cuando el Bilbao Básket claudicó en San Pablo. Tocaba frenar la euforia porque quedaba mucho por delante. Ahora, dos jornadas después, las sonrisas se han vuelto a convertir en desasosiego con la segunda derrota consecutiva del conjunto de Luis Casimiro, esta vez ante un rival directo por la permanencia como el Fuenlabrada que de un 71-78 le dio la vuelta al choque en los últimos tres minutos con un parcial 11-3 para ganar por 82-81 y volver a meter en el fango al cuadro hispalense, otra vez en puestos de descenso. 

Y eso que el cuadro visitante pareció dar el golpe de la mano de un activo Oriola bajo los aros. El catalán puso el 71-78 ante un oponente que parecía tocado. Nada más lejos de la realidad. Mayo respondió con un triple y comenzó el carrusel de fallos desde la línea de personal (13/22 en el partido) para darles la vida a los madrileños. Primero el propio Oriola, que erró uno de los dos de los que dispuso. Después Balvin, al que le pudo la presión del Fernando Martín y mandó por dos veces el balón al aro, antes de que una falta en ataque de Oriola les diese a los de Hugo López una nueva posesión. Paso a paso y con Akindele martilleando el aro sevillano, el 80-79 pasó todos los nervios y la responsabilidad al CB Sevilla. Hernangómez respondió, Mayo erró el triple y Penney, enchufado en el primer cuarto con 12 puntos, falló también desde la línea de los 6,75 metros. 

 

En los momentos decisivos tener un líder de la talla de Panko es una garantía. El estadounidense no falló desde la personal (82-81) y con 15 segundos el CB Sevilla atacaba para ganar. La defensa local funcionó y Radicevic perdió la bola ante la presión de Akindele y Mayo y todo se acabó para un conjunto que tras sacar la cabeza vuelve a estar metido en el fango hasta el cuello.

 

Resulta incomprensible que con el partido en sus manos (71-78) Akindele solo liderara la reacción. El pívot del Fuenlabrada (24 puntos y ocho rebotes) se comió todo el juego interior hispalense como ya hizo Lima la pasada semana y por ese agujero en el cinco se empezó a perder el partido, no al final, sino mucho antes. Entre Berni, Byars y las ayudas de todos el equipo logró sujetar en lo posible a Panko, pero se les escapó Akindele.

 

Así, con la máxima igualdad, se decidió un duelo que estuvo siempre en un pañuelo. Penney sostuvo al CB Sevilla con 12 puntos en el primer cuarto, y Burtt y Smits hicieron lo propio con los locales en el segundo para llegar al descanso con empate a 42 puntos. Los nervios que se sentían en la grada se trasladaban a la pista, en la que los colegiados llamaban la atención a todos los jugadores casi en cada defensa para que el encuentro no se les fuese de las manos. Akindele emergió tras el paso por los vestuarios para darles la máxima renta a los suyos (60-53), pero entre Radicevic y Byars metieron de nuevo a los suyos pese a que el serbio inició un carrusel de fallos desde la personal (2/4). 

 

Con dos triples de Byars y Penney arrancó el cuarto decisivo. Había vida. Surgió Oriola (11 puntos en los últimos 10 minutos) y el CB Sevilla tuvo el partido y media temporada en sus manos (71-78), pero se derrumbó para volver al fango y regresar tocado. Quién sabe si hundido.

Ficha técnica: 

82 - Montakit Fuenlabrada (16+26+18+22): Mayo (6), Cvetkovic (6), Panko (16), Vega (3), Akindele (24) -quinteto inicial-, Díaz (2), Pérez (3), Clark (2), Diagné (1), Smits (7) y Burtt (12). 

81 - Baloncesto Sevilla (20+22+17+22): Woodside (7), Penney (17), Rodríguez (3), Porzingis (4), Hernangómez (6) -quinteto inicial-, Byars (14), Urtasun (-), Radicevic (5), Balvin (4) y Oriola (21). 

Árbitros: Martín Bertrán, Castillo y Rial. Eliminados por cinco faltas personales los locales Vega (min. 34) y Clark (min. 37); y el visitante Oriola (min. 39). 

Incidencias: Encuentro correspondiente a la vigésimo tercera jornada de la Liga Endesa ACB disputado en el Pabellón Fernando Martín ante unos 5.507 espectadores. 

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