Hojiblanca cambia de nombre para crecer y pasa a llamarse Dcoop

En abril de 1997 se presentó en público por primera vez el aceite de oliva virgen extra con la marca Hojiblanca que, a lo largo de los años, ha conseguido ser líder en ventas nacional en su sector gracias, entre otras cosas, a los acuerdos de patrocinio con Karlos Arguiñano, Antonio Banderas o David Bisbal. La cooperativa andaluza comunicó ayer que el nombre de Hojiblanca pasará a la historia y que será sustituido por Dcoop (De la cooperativa).

La firma explica que este cambio de denominación se justifica en el hecho de que quieren "cubrir más territorios y más actividades" y buscaban un nombre que "sea capaz de identificar e identificarse". Tanto el aceite como el resto de productos de la cooperativa tendrán el nuevo nombre en breve.

La nueva marca trae del brazo un nuevo socio, pues la asamblea general de Hojiblanca ha aprobado la fusión con la cooperativa aceitera granadina Tierras Altas, que fue fundada en 2009 y que produce unas 25.000 toneladas anuales. En conjunto, la ahora Dcoop mantiene su liderazgo mundial con la producción de 250.000 toneladas de aceite de oliva virgen y 67.000 de aceituna de mesa, lo que le permite ser la mayor cooperativa agroalimentaria andaluza y la tercera española en facturación con unos ingresos anuales que rondan los 600 millones de euros. Más de 65.000 agricultores y ganaderos andaluces, extremeños y manchegos están ligados a este grupo, cuya sede central está en Antequera.

El fuerte crecimiento de Hojiblanca se sustenta en cuatro ejes fundamentales. En primer lugar, ha sabido vencer los localismos y unir a miles de agricultores y ganaderos de distintas provincias, permitiendo aumentar su producción general y conseguir economías de escala. Por otra parte, ha diversificado su producción y, además del aceite, trabaja la aceituna de mesa o la ganadería. El pasado 17 de septiembre la asamblea aprobó crear una nueva línea en la que se comercializarán los granos producidos por sus cooperativas asociadas (cereales, oleaginosas y leguminosas), estimando una producción inicial de 40.000 toneladas anuales.

En tercer lugar, Hojiblanca decidió hace casi dos décadas no vender su aceite sólo a granel sino envasarlo con marca propia, lo que le da una mayor visibilidad, márgenes comerciales y presencia en los mercados. Por último, siempre ha defendido la posibilidad de crecer vía fusiones con multinacionales y en este aspecto siempre ha sido bastante activa. La última fue en mayo de este mismo año cuando la asamblea general de Hojiblanca aprobó convertirse en parte de Deóleo -el primer envasador mundial de aceite de oliva con marcas como Carbonell o Bertolli- con un 9,6% de las acciones a cambio de la marca Hojiblanca y la planta de envasado de Antequera.

José Moreno, presidente de Hojiblanca desde el año 2000, seguirá en el cargo con la nueva nomenclatura y la incorporación de más socios al ser el único candidato al puesto.