"Nunca, ni en los peores momentos de la crisis, hemos dejado de dar créditos"

Seis años después de que comenzara la crisis, el escenario en el que se mueven las entidades financieras ha cambiado radicalmente. Pese a todo, Banco Popular, el quinto grupo financiero español, se mantiene fiel a un modelo de negocio basado en las pymes y en la inversión estratégica.

-¿Cuál es la actual situación de Banco Popular?

-Banco Popular se encuentra muy bien, fuerte, con una importante solvencia y una importante recurrencia en sus ingresos, lo cual indica que somos capaces de generar suficientes ingresos para dotar las provisiones necesarias en estos momentos. En principio, todo va viento en popa.

-La pyme es precisamente la base de la filosofía del banco...

-Sí, la filosofía de Banco Popular se corresponde con un modelo de negocio enfocado principalmente a la atención a las pymes, a comercios, autónomos y familias. Banco Popular ha puesto a disposición de las pymes desde principios de año más de 6.900 millones de euros. El modelo de negocio del banco está muy centrado en la atención a estas empresas, que son nuestros principales clientes. Un 83% del margen bruto lo obtenemos principalmente de las empresas, y el 69,4% de nuestros activos totales medios los tenemos gracias al negocio que tenemos con las pymes.

-¿Así que Banco Popular sigue dando créditos?

-Banco Popular nunca, ni en los peores momentos de la crisis, ha dejado de dar crédito. Lógicamente nos encontramos en una situación complicada todavía. Hay que ser prudentes respecto a la recuperación económica, aunque ya existen muchos signos que nos hacen ver que puede llegar pronto. No obstante, las entidades financieras todavía no han llegado a su techo de morosidad, pero esperamos que pronto empiece a reducirse. Esto normalmente suele llegar unos trimestres después de haberse consolidado la recuperación económica. Siendo muy prudentes, porque la situación todavía es delicada, somos bastante optimistas en los signos que estamos viendo.

-¿Hay realmente brotes verdes?

-Hay síntomas de recuperación. Nosotros queremos ser muy prudentes, pero sí que nos llegan proyectos de inversión y creo que estos síntomas cada vez son más evidentes. Llegará un momento en el que notemos el punto de inflexión, que cada vez está más cerca, en el que la recuperación empezará a ser una realidad. Somos optimistas porque estamos viendo que las empresas cada vez están teniendo más capacidad de financiación y están accediendo a nuevos proyectos que antes estaban paralizados. Hay que tener en cuenta que las pymes son el motor del sistema productivo español, que dependemos de este tipo de empresas.

-Empresas y autónomos se quejan de que el dinero no llega, de que pese a la inyección millonaria de dinero público que se ha hecho en las entidades financieras, la economía real no recibe esos beneficios...

-Durante todos estos años ha habido unas exigencias regulatorias, una coyuntura económica que ha afectado mucho y una reestructuración del sistema financiero que ha sido muy importante. Han desaparecido más de 30 entidades del mapa, que tenían clientes y activos. Las entidades que han subsistido somos las que estamos atendiendo a estas pymes, pero hay un cierto tiempo para conocer a estas empresas. En cualquier caso, en Banco Popular estamos muy acostumbrados y tenemos unos equipos de gestores de empresas que están dedicados en exclusiva y que se dedican a buscar nuevas empresas, por lo que nosotros estamos totalmente habituados a recibir y a dar crédito a empresas nuevas. En el caso de Banco Popular no hemos cortado nunca el grifo, hemos estado concediendo crédito porque para nosotros el crédito es nuestra fuente de ingresos, son nuestras ventas. Estamos creciendo en crédito a empresas y en crédito a la exportación. Hemos crecido en nuevas empresas este año un 7,38%; en servicios bancarios en negocio internacional, un 20%; y en el resto de márgenes, casi un 10%. Nosotros siempre estamos dando crédito, nunca lo hemos cortado.

-¿Qué papel ha jugado Banco Popular en esta reestructuración?

-Hemos intervenido de forma muy activa. Primero, solucionando problemas de los demás, con nuestras aportaciones al fondo de garantía de depósitos y al Sareb. Y en segundo lugar, hemos comprado un banco, el Banco Pastor, que ha sido un banco rentable para nosotros, una buena compra. Lo hemos hecho además sin ayudas públicas de ningún tipo. Banco Popular es una de las pocas entidades españolas que no ha recibido ninguna ayuda pública y nuestra aportación ha sido muy importante.

-Una vez terminada esta fase, ¿qué posición ocupa Banco Popular?

-Somos actualmente la quinta entidad del país por activos totales medios, con 168.000 millones de euros.

-¿Ha terminado ya este proceso?

-Todavía existen entidades financieras nacionalizadas que están en subasta. Siempre y cuando aporte valor a accionistas, clientes y empleados, Banco Popular estudia todas las posibilidades de compra. Recientemente ha salido una, la de Novacaixagalicia, pero al banco no le ha interesado porque lo que buscamos es mantener nuestro modelo de negocio. Todavía van a quedar menos entidades, menos jugadores en el mercado, y queremos aprovechar la cuota de mercado que están dejando para seguir creciendo. No tenemos ninguna inquietud por comprar, pero cualquier entidad, siempre que sume valor, vamos a estudiarla y analizarla.

-¿Cuál es la posición de Banco Popular respecto a los desahucios, uno de los problemas sociales más acuciantes?

-Somos conscientes y muy sensibles a la realidad social que hay hoy en día. La coyuntura económica ha abocado a muchas personas al paro, somos conscientes de las desigualdades que hay, así que intentamos dar soluciones financieras a todas las familias que lo precisan. Incluso en aquellos casos en los que estas situaciones llevan a una ejecución hipotecaria, en ningún caso el Banco Popular ha realizado ningún desahucio forzoso. Ni lo va a hacer. Somos conscientes de que esta es una realidad y que mientras la coyuntura económica esté como está y el paro siga creciendo, vamos a tener clientes que no van a poder pagar las cuotas de sus préstamos. Además, estamos aportando al fondo social de vivienda más de 336 inmuebles para todas estas familias que lo puedan necesitar.

-¿Qué soluciones se les da a estas familias?

-Tratamos caso a caso, tenemos unos departamentos que se dedican con mucha intensidad a dar soluciones a estas personas, a darles plazo o buscar el ajuste necesario para poder seguir apoyando sus préstamos. Y en caso de que no sea posible, buscamos una solución que puede pasar por el alquiler social o la dación en pago, y hacemos lo que haga falta para conseguir que ninguna persona se pueda quedar sin su vivienda. Todos los desahucios han sido siempre consentidos y se han hecho sobre locales, empresas o segundas viviendas.

-¿Cómo ha afectado a Banco Popular la sentencia del Tribunal Supremo sobre las cláusulas suelo?

-Las mal llamadas cláusulas suelo, son cláusulas legales y lícitas y no son abusivas. Todo esto ha venido por una sentencia del Tribunal Supremo en la que no hablaba de si las cláusulas son legales o abusivas, sino transparentes. En el caso de Banco Popular, nuestras cláusulas son legales, lícitas y transparentes. Mantenemos nuestras postura.

-¿Pero ha habido reclamaciones?

-Por supuesto, y muchas. Desde el mes de julio, para evitar este problema, ninguna hipoteca que se está firmando en el banco contiene acotaciones mínimas.