"Almodóvar vendrá más pronto que tarde"

Sin principio ni fin, la dinámica de trabajo en el Festival de Málaga es un "presente continuo", por lo que ya se tiene la mente puesta en la edición número 23. "Ahora toca poner el foco en lo que hemos hecho bien y corregir lo manifiestamente mejorable", dice Vigar. Este año han llegado más de 2.400 producciones, entre largometrajes, documentales y cortos. Tan solo en la Sección Oficial el comité seleccionador ha visto 380 películas, 147 de ellas producciones eminentemente españolas. Aunque el arte entiende cada vez menos de fronteras.

-¿El festival se ha convertido en algo inabarcable?

-Yo más bien lo calificaría de importante y dimensionado. Desde hace tres años tenemos otras dos hojas de ruta muy interesantes, el abrazo al cine iberoamericano y la industria, que están haciendo que recibamos muchas más cintas al proceso de inscripción. Por otro lado, tenemos un elevadísimo número de visitantes y participantes en todas las actividades. Cada vez hay más interés por parte del sector en estar aquí. Ya es un evento con un peso específico muy significativo.

-¿Juega ya en primera división o todavía no?

-Claramente estamos en la primera división en cuanto a festivales, no sólo de España, sino internacionales en el ámbito, al menos, iberoamericano. Estamos incluidos dentro de los listados estratégicos de todos los institutos de cine iberoamericanos y dentro del Plan de Internacionalización de la Cultura. Nuestro mercado es el único oficial avalado por el ICAA, el ICEX y la Junta de Andalucía. Y el resto de proyectos generan un interés extraordinario.

-¿Cree que Málaga le da más al cine español de lo que el sector aporta al Festival de Málaga?

-No. El hecho de que determinados realizadores o películas vengan a Málaga dependen de muchos más factores que el propio deseo del festival y del realizador. Entran cuestiones que tienen que ver con los plazos de rodaje, postproducción, los planes de estreno de las distribuidoras, el encaje en el año de sus procesos de estreno... Con el tiempo esto tendrá solución y vendrán esos realizadores porque hay deseo de que eso sea así por parte de todos. El cine español le da también mucho a Málaga.

-¿En qué sentido?

-Pues lo primero es que las instituciones gubernamentales que tienen que ver con el audiovisual están apoyando de manera muy intensa lo que aquí se está viviendo. Los productores y distribuidores independientes tienen aquí su casa y su lugar de encuentro.

-Este año la coincidencia del estreno de Almodóvar sin pasar por Málaga ha dado que hablar...

-Quien está en el sector sabe cuáles son los canales de estreno habituales de Almodóvar, su estreno comercial y su posterior paso por Cannes. La presencia en Cannes imposibilita que esta película pueda ir a un festival que se celebre con antelación. De ahí que resultaba complicado que la cinta viniese a Málaga. Pero hemos estado en conversaciones con el realizador para rendirle el homenaje que se merece. Se contempló como posible hasta un determinado momento, pero luego las obligaciones y circunstancias del estreno de la película lo ha hecho imposible. Estoy seguro de que vendrá más pronto que tarde, que cumplirá su deseo de estar aquí en Málaga, un deseo compartido por nosotros.

-A la Sección Oficial se han presentado 147 películas españolas y 233 iberoamericanas. ¿Cómo valora la producción en este momento?

-Es evidente que se están haciendo más películas. Hablar de 147 largometrajes españolas es decir mucha producción. Al margen de la cantidad, hemos encontrado películas muy interesantes. Creo que la Sección Oficial muestra una imagen representativa y equilibrada de todo lo que se hace. Hemos tenido nombres con trayectoria y directores jóvenes que demuestran que tienen talento y aportan una mirada indagadora. Hemos unido diferentes formatos y géneros, producciones de factura muy diversa. Este es el modelo que nos exige el sector con todo derecho y tenemos que ser sensibles a la hora de entender lo que nos demandan para ser útiles.

-¿El público respalda el festival?

-No conozco ningún otro festival que tenga esta singularidad, el festival se da a la ciudad, pero es que la ciudad abraza al festival como algo fundamental y eso me lo dicen todos los invitados sin excepción. Todos se quedan realmente sorprendidos por este hecho. El festival para Málaga es algo irrenunciable. El festival ya es un gran evento y confío en que tenga un futuro enorme.

-¿Y cuáles son las claves fundamentales para que esto suceda?

-Debe de ser útil, coherente y cercano, tener una interlocución amable con todos. Si unes esas tres características te sale la cuarta, el futuro, lo que más me preocupa, que el festival gane futuro como proyecto. Tenemos un evento con tan solo 22 años del que ya nos sentimos orgullosos. Es un festival joven, pero con mimbres de madurez.

-No estaría mal contar con más presupuesto...

-Evidentemente. El crecimiento del festival implica la necesidad de aplicar mayores recursos, pero entiendo que ese aumento no debe de venir siempre de la aportación municipal, sino del propio proceso de crecimiento y de la capacidad de conexión con patrocinios privados e institucionales.