Clamor en Cataluña por el 'Estatut'
El tripartito y CiU anuncian graves consecuencias para todo el país con un hipotético recorte del Tribunal Constitucional · Mas insta a Montilla a aunar fuerzas y aboga por reclamar un concierto económico
Dirigentes de PSC, ERC, ICV-EUiA y CiU alertaron ayer de las graves consecuencias que conllevaría no sólo para Cataluña sino también para España un hipotético recorte del Estatuto catalán por el Tribunal Constitucional (TC).
El presidente de CiU, Artur Mas, propuso al resto de partidos políticos catalanes pactar un plan b si el TC tumbara el Estatut, que pasaría por ir más allá de la vía estatutaria y unir fuerzas para conseguir el traspaso de los aeropuertos de Cataluña y un concierto económico. "Lo que no nos podrán decir -subrayó- es que gestionar los aeropuertos catalanes desde Cataluña o adoptar un concierto económico con el que Cataluña pueda gestionar sus propios recursos son temas que no caben en la Constitución".
La transferencia de la gestión del aeropuerto de El Prat podría hacerse invocando el artículo 150.2 de la Constitución, alusivo al traspaso de competencias, mientras que el Concierto Económico, que no está recogido en el capítulo de financiación del actual Estatuto, debería negociarse directamente con el Gobierno español de turno.
El presidente catalán, el socialista José Montilla, exigió ayer "lealtad institucional y sentido de Estado" frente al "pacto político" que supone el Estatut y subrayó la "voluntad insobornable" de Cataluña de desarrollar esta ley orgánica, puesto que, apostilló, "es nuestra ley, nuestra voluntad" .
El presidente aprovechó la toma de posesión de los integrantes del Consejo de Garantías Estatutarias, el organismo que sustituye al Consejo Consultivo, que analizó la constitucionalidad del proyecto de Estatut en 2005, para dejar claro al Gobierno español que se mantendrá firme en defensa del Estatut, "el instrumento jurídico más potente del que Cataluña ha dispuesto desde hace siglos. No lo menospreciaremos -agregó Montilla- ni renunciaremos a alcanzar sus principales objetivos".
El líder de ERC, Joan Puigcercós, considera "comprensible" que entre algunos partidos catalanes "haya nerviosismo" ante una posible sentencia adversa contra el Estatut, porque "a CiU, PSC e ICV les resultará muy difícil explicar España a los catalanes" y defender el "autonomismo o el federalismo". En la misma línea, el secretario general de ERC, Joan Ridao, aseguró que una sentencia en contra del Estatuto reforzaría las tesis de su partido, ya que supondría "el final del Estado autonómico" y generaría "una auténtica fábrica de soberanistas".
El secretario general de ICV, Joan Herrera, dijo que si el TC declara inconstitucional el Estatuto habría que reformar la Carta Magna o el propio Alto Tribunal.
La presidenta del PP catalán, Alicia Sánchez-Camacho, tildó de "irresponsable" y "lamentable" la campaña de "desprestigio" que a su entender ha iniciado Montilla contra el TC. "Los socios del tripartito le estaban haciendo el trabajo sucio la semana pasada a Montilla, que ahora ha actuado de forma irresponsable. Les pedimos que actúen respetando las instituciones", dijo la dirigente popular.
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