Fabra afirma que una "galleta" no es óbice para ser candidato

El presidente de la Generalitat valenciana, Alberto Fabra, afirmó ayer que no cree que "una galleta" sea motivo para excluir a alguien de las listas electorales, en referencia a la diputada autonómica procesada por una falta de lesiones después de que supuestamente lesionara a una mujer con la que discutió en un albergue de animales.

Fabra se pronunció de esta manera al responder a preguntas de los medios por el caso de Elisa Díaz -hija del ex alcalde de Alicante Luis Díaz Alperi-, en el marco de unas declaraciones sobre la línea roja marcada por él mismo para excluir de las listas electorales a personas imputadas en casos de corrupción. "Una galleta no creo que sea motivo", declaró el presidente valenciano.

"Saben perfectamente lo que es la línea roja en cuanto a temas de corrupción y no es esa", comentó Fabra, quien apuntó que en este caso se trata de un "desagradable incidente" que Díaz "tendrá que asumir como ciudadana, no como cargo público".

El presidente valenciano advirtió por otra parte que es la alcaldesa de Alicante, Sonia Castedo, quien debe valorar "en cualquier momento", tras su citación como imputada por el plan urbanístico de Rabasa, lo que significa para ella y para la institución su acta de concejala. "Cada uno es titular de lo que es su acta, es personal", declaró Fabra a los periodistas.