Mapa electoral multicolor

EL actual alcalde socialista de Cartaya y candidato a renovar el cargo en las municipales del 22-M, Juan Antonio Millán, afronta una de las campañas electorales más complicadas a las que ha tenido que hacer frente en su ya dilatada trayectoria política.

Una trayectoria en la que hasta ahora se ha mostrado como un rival prácticamente imbatible, así como el líder indiscutible de una localidad a la que ha convertido en uno de los más sólidos bastiones socialistas de Andalucía tras 24 años ganando comicios locales (los últimos 20, con mayoría absoluta), siendo en el año 1999 el alcalde más votado de España en municipios de más de 10.000 habitantes con el apoyo del 74,54 % del electorado. La radiografía electoral de Cartaya previa a estas municipales ha cambiado de forma notable, sobre todo atendiendo al número de formaciones políticas que intentarán romper la indiscutible hegemonía del todopoderoso alcalde cartayero.

En los seis plebiscitos locales anteriores, entre 1987 y 2007, tres fueron las formaciones políticas que lucharon por la Alcaldía de Cartaya (PSOE, PP y PA), con la excepción del 87, cuando la formación Cartayeros Independientes irrumpió de forma decisiva sumando sus 3 concejales a los 4 del PA para arrebatar la Alcaldía al PSOE (que ganó con 5). Más recientemente, en los comicios de 2003 y 2007 entró en escena IU, que logró 1 y 2 concejales, respectivamente, pero no logró romper la racha de mayorías absolutas del PSOE desde 1991. Tanto PP como PA han vivido historias bien distintas en Cartaya. El primero por no romper su techo electoral de 2 concejales en ninguna de las elecciones desde 1987, y el segundo, en claro declive y estancamiento desde que el andalucista Miguel Romero perdiera la Alcaldía en 1991 con 6 ediles, frente a la primera de las 5 mayorías absolutas de Millán. Desde 1995 los resultados del PA oscilan entre 2 y 3 ediles.

Frente a lo que ocurrió en anteriores comicios con las tradicionales candidaturas, el 22-M se presenta para los 12.359 electores cartayeros con una diversidad de opciones nunca vista con la incorporación de UPyD, Independientes por Cartaya y el Partido Ibérico de los Rumanos, además de una IU que ha integrado en su lista a varios miembros del Movimiento por la Unidad del Pueblo-Republicanos. En total, 7 candidaturas que cubren el arco ideológico más amplio de la historia de las municipales cartayeras. A este panorama se suma el mandato más difícil que ha tenido que encarar el actual regidor cartayero por la complicada situación económica de los ayuntamientos y por la dura batalla que contra él han librado los grupos de la oposición en bloque. Ingredientes que sin duda van a hacer de éstas unas elecciones distintas para todos desde el punto estratégico.

El veterano alcalde, del que casi nadie cuestiona su contribución a la transformación de Cartaya en las dos últimas décadas pero al que sus oponentes critican precisamente su desgaste, presenta una candidatura renovada en la que sólo repiten cuatro personas (incluido él), a la que ha calificado como "ganadora, joven, experta, ilusionada, honesta y con capacidad para escuchar, dialogar, decidir, trabajar y gobernar".

El PSOE vuelve a apostar por Millán. Se presenta por séptima vez ante los cartayeros con un programa "pensado para un nuevo modelo de ciudad en un cambio de ciclo y para la reactivación económica y del empleo en Cartaya", según dice Millán.

Entre los logros más importantes de su actual mandato, que le sirven como aval para revalidar la Alcaldía, Millán presenta el centro de mayores y dependientes, la piscina municipal cubierta, la ampliación del complejo deportivo, la modernización del centro, el nuevo mercado municipal, el centro de día de mayores de El Rompido y la reordenación del Piedras.

Enfrente tiene una oposición que al margen de las nuevas formaciones políticas, está marcada por la unidad de acción contra el PSOE y por la dureza en su labor de oposición durante este mandato. Suena así el run-run de un posible pacto a la griega para desbancar a Millán de la Alcaldía si el PSOE no logra la mayoría absoluta. Rumores que se asientan en el compromiso público de casi todos los partidos de no pactar con el PSOE.

El PP, una de las formaciones que se muestra más rotunda en este compromiso, concurre esperando romper su techo electoral aprovechando sus buenas previsiones nacionales. Para ello recupera al anterior alcalde popular de Villablanca, Carlos Pérez, que se ha rodeado de un equipo renovado, salvo el número dos, Gabriel Maestre, que fue candidato en el año 2003.

Gea repite como cabeza de lista por tercera vez con IU. Le acompaña una lista renovada, sobre todo por la incorporación de varios jóvenes republicanos del MUP-R. De su programa destaca la auditoría de las cuentas municipales, la creación de bolsas de trabajo para repartir el empleo municipal, el fomento de una agricultura respetuosa con el medio ambiente y los trabajadores, presupuestos municipales participativos, la defensa del Piedras con un turismo compatible con la naturaleza y la pesca y un urbanismo al servicio del pueblo.

Gea es uno de los más duros oponentes de Millán en los últimos años junto con el independiente Juan Miguel Polo, que tras varios años como hombre fuerte de los gobiernos socialistas de Millán, abandonó sus filas nada más comenzar el mandato, aunque no dejó su acta de concejal pasando a ser no adscrito. El PA-Ep-And estrena siglas y candidato con Pedro José Benítez.