La mujer trató de despistar a la Policía desde el principio

Crimen pasional en Dos Hermanas

Relató en sus primeras declaraciones que su marido había sido amenazado tras un accidente y también apuntó a posible ajuste de cuentas por un narcotraficante

Prisión para los dos investigados por el crimen de Dos Hermanas

El lugar donde fue hallado Rafael Linares, con su coche aún estacionado.
El lugar donde fue hallado Rafael Linares, con su coche aún estacionado. / Cadena Dh

13 de marzo 2022 - 05:40

La Policía considera que Tamara N. B., la esposa de Rafael Linares, trató de despistarlos desde el inicio de la investigación del asesinato, ofreciendo diferentes pistas para desviar la atención de los investigadores. En su primera declaración como testigo ante la Policía, Tamara les dijo a los agentes que el mismo día de los hechos, el 5 de noviembre de 2021, su marido había tenido un accidente leve con otro vehículo, al que alcanzó por detrás, y que los ocupantes de ese coche eran "varias personas de etnia gitana" que lo habían amenazado y que esas amenazas se habían repetido por teléfono.

Según ese primer testimonio, como Rafael estaba "muy nervioso" por esas amenazas, fue la propia Tamara quien le propuso salir un rato, desplazándose hasta el bar de copas donde coincidieron con unos amigos. Sobre las 23:45 horas, ella asegura que se marchó andando, mientras Rafael se quedó en el bar, y que no fue hasta la mañana siguiente cuando recibió una llamada de su hermano indicándole que su marido estaba en el hospital.

Antes de salir con el marido, Tamara había salido del local en una ocasión anterior y permaneció fuera "18 minutos", llevando consigo el teléfono móvil de su marido, dado que el suyo aseguraba que se lo había dejado olvidado en casa, algo que no los investigadores no creen, sino que consideran que fue un hecho deliberado para evitar que la Policía pudiera reconstruir sus movimientos. La Policía sospecha además que Tamara pudo borrar mensajes de whatsapp de ese teléfono.

En otra declaración, Tamara les contó a los agentes que un vecino suyo le había comentado que su marido "le debía mucho dinero a un narcotraficante del barrio de Los Potros de Dos Hermanas y que éste estaba relacionado con la muerte de Rafael". La Policía le tomó declaración al vecino, quien negó todos los extremos que había asegurado la esposa respecto a que lo ocurrido podría deberse a un posible ajuste de cuentas.

La Policía comprobó que era imposible que Tamara volviera a su casa andando

Como la Policía sospechaba que Tamara estaba intentando centrar su atención en personas que no tenían nada que ver con los hechos, los investigadores estudiaron el recorrido que supuestamente había realizado a pie desde el bar a su casa, comprobando además si había cámaras de negocios que la hubiese podido grabar y el tiempo invertido en el trayecto. Entre que se marcha del bar, llega a su casa y le envía el mensaje cariñoso a su marido, a las 00:13 horas, transcurren un total de 23 minutos, pero el trayecto según comprobaron los propios investigadores "no es posible realizarlo a pie a un paso normal en no menos de 40 minutos y a un paso más ligero en en no menos de 33 minutos". Con lo cual, concluyen, que debió realizarlo utilizando un vehículo.

Estas sospechas hicieron que los agentes solicitaran la intervención del teléfono de Tamara, pero las escuchas muestran una vez más las precauciones que tomaba, evitando en todo momento hacer referencia alguna a los hechos. De ahí que decidieran poner escuchas en el domicilio.

stats