Un juzgado de lo Social de Sevilla ha declarado la Incapacidad Permanente Absoluta de una trabajadora que padece fibromialgia porque entiende que un trabajo, "por liviano que sea, sólo puede realizarse mediante la asistencia diaria al lugar de trabajo en condiciones de normalidad en el comportamiento y hábitos sociales del trabajador, es decir, se requiere siempre tener la capacidad de desarrollar una actividad con un mínimo de rendimiento y asiduidad".

En este caso, la trabajadora había sido declarada en situación de Incapacidad Pemanente Total por el Instituto Nacional de la Seguridad Social en 2002 y la revisión del grado fue rechazada, acudiendo la mujer a los tribunales, donde ha sido representada por el abogado Álvaro Jiménez Bidón.

En la sentencia, el juez señala que la trabajadora presenta un cuadro clínico de hernia discal, con síndrome de sensibilidad central con fibromialgia y fatiga crónica, entre otras patologías que le "impiden los mínimos requerimientos físicos y las situaciones de estrés".

El magistrado concluye que estas patologías y las limitaciones funcionales le impiden "por completo la realización de cualquier profesión u oficio, por lo que debe ser declarada en situación permanente absoluta".

En este sentido, el juez señala que debe considerar incapacidad permanente absoluta la pérdida que sufre de la "aptitud psicofísica necesaria para desarrollar una profesión en condiciones de rentabilidad empresarial, con la necesaria continuidad, dedicación, rendimiento, eficacia y profesionalidad exigible a un trabajador diligente y normal", según varias sentencias del Tribunal Supremo.

De otro lado, el abogado Álvaro Jiménez Bidón ha explicado a este periódico que las asociaciones de Fibromialgia y síndrome de fatiga crónica Afina de Dos Hermanas y Fibroaljarafe de San Juan de Aznalfarache han firmado un acuerdo de colaboración con el bufete Jiménez Bidón Abogados para que este despacho se encargue del asesoramiento jurídico de quienes padecen estas patologías, en cuanto a la posibilidad de obtener una pensión vitalicia por incapacidad permanente.

El letrado Álvaro Jiménez Bidón asegura que cada día son más los pacientes afectados por estas patologías tan dolorosas, degenerativas y crónicas, siendo "muchos de estos enfermos desconocedores de la posibilidad que disponen, a la luz de las últimas resoluciones judiciales, de obtener una pensión vitalicia de incapacidad permanente de la Seguridad Social".

El abogado señala que ha logrado en varias sentencias que los tribunales reconozcan a personas con estas dolencias una incapacidad permanente absoluta, concediéndoles una pensión del 100% de sus bases reguladoras, siempre con el tope establecido para este año 2019, que asciende a 2.659,41 euros/mes.

Desde las asociaciones convocantes, que reúnen a amplios colectivos afectados por fibromialgia y síndrome de fatiga crónica, se está informando y asesorando, a través del bufete, de los trámites necesarios para llegar a ser beneficiarios de una declaración de invalidez permanente, con la consiguiente pensión vitalicia.