La Audiencia de Sevilla ha condenado a dos años y medio de cárcel a dos hombres de 31 y 34 años que robaron una pulsera en una vivienda tras romper los barrotes de un aseo y luego huyeron por el patio de la casa adyacente hasta que fueron detenidos cuando estaban escondidos en un armario.

El robo ocurrió el 7 de diciembre de 2019 en Dos Hermanas y los acusados cumplieron prisión provisional desde ese día hasta el 21 de julio pasado, cuando se celebró el juicio en la Sección Tercera de la Audiencia, donde aceptaron una condena de dos años y medio y a continuación quedaron en libertad.

La sentencia de la Audiencia, a la que tuvo acceso este periódico, explica que los acusados son Pablo C.S., de 33 años, y Ezequiel R.J., de 31. A este último le consta una sentencia anterior por resistencia a la autoridad y lesiones, y Pablo había sido condenado, "entre muchas otras", en ocho sentencias firmes por robo, recuerda la Audiencia.

El 7 de diciembre de 2019, sobre las 17:45 horas, los acusados doblaron los barrotes de la reja de un aseo y se apoderaron de una pulsera que se hallaba en la  repisa de uno de los dormitorios.

Al advertir la presencia policial en el exterior de la vivienda, saltaron al patio de otra casa, donde se ocultaron en el interior de un armario de PVC y fueron interceptados los los agentes que les buscaban por las casas cercanas.

Pese a que la Policía se identificó y les manifestó “de forma clara y contundente” que debían alzar las manos y tirarse al suelo, los dos ladrones comenzaron a lanzar golpes, patadas y puñetazos a los agentes y tres de ellos resultaron con fractura de dedos de las manos, excoriaciones, arañazos y edemas.

Según el acuerdo alcanzado antes del juicio, son  condenados por un delito de robo con fuerza en las cosas cometido en casa habitada a dos años de cárcel y por otro delito de atentado a seis meses de prisión. Por dos delitos leves de lesiones, a sendas multas de 15 días con cuota de seis euros (equivalente a 90 euros) y además Ezequiel por otro delito de lesiones a una multa de tres meses con cuota de 6 euros (540 euros).

La sentencia les aplica la atenuante de drogadicción y de reparación del daño ya que antes del juicio indemnizaron a uno de los agentes en 6.000 euros, a otro en 150 y consignaron 1.200 euros, aunque aún les queda por abonar 3.500 euros.