La Choni lucha contra el tiempo en su nuevo montaje

Choni Compañía Flamenca presentó ayer su montaje Tejidos al tiempo. El espectáculo, que se estrena esta noche a las 23:00 en el Teatro Alameda, es una representación que versa sobre la fugacidad de la vida y el paso del tiempo.

Asunción Pérez La Choni, antigua bailaora de la Compañía de Eva Yerbabuena, a la que sigue considerando su maestra, llega ahora a a la Bienal de Sevilla con su propia compañía para estrenar Tejidos al tiempo, obra con música de Raúl Cantizano, cante de Alicia Acuña y Sebastián Cruz y letras de Juan Vergillos. De la dramaturgia se encarga Jorge Barroso Bufi, quien durante año y medio ha apoyado a La Choni en el proceso de construcción de este espectáculo. "No es tanto lo que contamos como la forma en que lo contamos", explica Barroso, que ha resaltado especialmente una de las escenas del montaje en la que La Choni "baila con una bata de cola que no lleva puesta".

La bailaora ha confesado que en los orígenes de Tejidos al tiempo hay "una necesidad personal de avanzar y crecer profesionalmente". Rechaza cualquier pretensión efímera de saltar a la fama, y justifica cada uno de los momentos del montaje con su "compromiso con el trabajo".

La obra, según Barroso, se basa en la pregunta "¿cómo podemos vencer al tiempo y a la muerte?". La respuesta estaría en la vida, que se representa a través del baile, que es una lucha continua contra el inmovilismo de la muerte.

"Si tuviera que describir mi baile con una palabra, esa sería elegancia", comenta La Choni, que a pesar de su juventud ya cuenta con una carrera sólida en grandes compañías como la de Mario Maya o Antonio El Pipa. "Para mí este montaje es una apuesta muy arriesgada, porque he querido hacer cosas y bailar estilos que no había probado antes", admite la bailaora, que se embarcará durante una hora en una batalla contra el tiempo a través de milongas, seguiriyas y fandangos que servirán de metáfora para reflejar los mundos de la vida y la muerte.

El espectáculo, que según la sevillana es reflejo de su "amplio abanico de posibilidades" como bailaora, es una historia "contada con un lenguaje visual nuevo, pero radicalmente flamenco".