La danza clásica de la India llega con Priyadarsini Govind al Central

Hoy y mañana, la Sala B del Teatro Central de Sevilla acoge la actuación de la bailarina Priyadarsini Govind, virtuosa de uno de los estilos clásicos más apreciados de la India: el Bharata Natyam. Con ello el teatro de la Isla de la Cartuja se suma a una tendencia ya presente desde hace años en numerosos teatros europeos y que en esta ciudad sólo había tenido cabida en salas alternativas y en el TNT, sede de la compañía teatral Atalaya que dirige Ricardo Iniesta. Como el kathakali (danza masculina) y el Orissi, y también como el flamenco, el Bharata Natyam es un diálogo en vivo entre unos músicos, un cantante y una bailarina que utiliza una compleja y sofisticada técnica corporal, llena de sensualidad, para transmitir sus sentimientos y sus emociones... O los de otros, y ésa es una de las diferencias que presentan, frente al flamenco, las danzas indias, o mejor dicho hindúes puesto que en sus inicios se celebraban en los rituales de los templos hinduistas, de los que conservan vestigios como la dedicatoria inicial a los dioses.

Al contrario que la danza más popular de nuestro país, completamente abstracta, las danzas hindúes tienen, junto a momentos de danza pura o rítmica, partes narrativas o con significado, es decir, danzas en las que la bailarina interpreta a través de los gestos (las posiciones del cuerpo son las pada bheda mientras los gestos de las manos se denominan mudras) las historias que va contando el cantante y que proceden en su mayor parte de los grandes poemas épicos Mahabharata y Ramayana. Las bailarinas-actrices, pueden interpretar a distintos personajes y su maestría en la recitación es tal que son muchos los que las sitúan en el origen de la que en Occidente se ha denominado danza-teatro ("Natyam").

Priyadarsini Govind comenzó su formación artística a los seis años en Madrás (Chennai) y desde los 16 no ha dejado de actuar públicamente, tanto en la India como en Europa, dando a conocer este peculiar estilo en el que, junto a los complejísimos períodos rítmicos y a los célebres karana o posiciones míticas que reproducen las esculturas de los templos de Tamil Nadu, el estado indio del que procede, ella introduce algunos poemas contemporáneos y su particular manera de interpretarlo. "La importancia de la mezcla entre la música y la danza es crear una sensación de alegría en el público a través de la comunicación con la danza y poder viajar junto a ellos", aclaraba ayer la bailarina, durante la presentación de su espectáculo en Sevilla.