MAGNIFICA el ya de por sí magnificado conflicto de las basuras esa foto que ayer venía en los papeles y en la que se veía una gran humareda al cielo del hospital Macarena. Humareda que ya sufrimos la otra noche en una céntrica calle que apenas deja ya espacio para la normal circulación de coches y de viandantes. La huelga y sus daños colaterales que provienen del vandalismo y del incivismo, de los actos delictivos de los huelguistas y de la falta de cabeza de una ciudadanía que echa a los contenedores objetos que bien pudieran seguir en casa mientras dure el temporal. Pero a lo que íbamos, a esa foto ennegrecida por el humo que sube por la fachada de un hospital y que podría haber acarreado incalculables fatalidades. Claro que al lado, otra foto te hace comprender lo que pasa y es la de cómo la leal oposición se coloca tras la pancarta de los huelguistas. Así, ya se sabe...