Dos detenidos por intentar matar a un joven en una fiesta de fin de año en Villanueva del Río y Minas
La víctima, de 19 años, recibió siete puñaladas, una de las cuales se quedó a dos centímetros del corazón
Los sospechosos huyeron tras la pelea y se ocultaron durante varias semanas en casas de amigos y familiares
Apuñalan a un joven con un destornillador en una discoteca de Sevilla
Una pelea en una fiesta de fin de año estuvo a punto de acabar de manera trágica en Villanueva del Río y Minas. Un joven de 19 años resultó herido grave tras ser apuñalado hasta en siete ocasiones. Un mes después de los hechos, la Guardia Civil informó este martes de las detenciones de los dos presuntos autores de la agresión, que ha sido calificada como un homicidio en grado de tentativa.
El suceso se produjo en las inmediaciones de una carpa en la que se celebraba una fiesta de Nochevieja. Un grupo de jóvenes del pueblo, entre los que se encontraba la víctima, se topó con otro grupo y empezaron a discutir. Se intercambiaron insultos y los integrantes de ambos bandos comenzaron a increparse. Ahí comenzó una pelea entre dos jóvenes, uno de cada grupo. Otro chico trató de separarlos.
En ese momento, uno de los contendientes sacó una navaja de grandes dimensiones. Otro de los miembros del grupo arrebató el arma blanca a este joven y apuñaló con ella al chico que había tratado de mediar en la pelea. Recibió hasta siete puñaladas y quedó inconsciente en el suelo.
Después sería atendido por los servicios de emergencias sanitarias y trasladado al Hospital Virgen Macarena, donde ingresó en la UCI. Las lesiones eran muy graves y salvó la vida por poco, pues una de las heridas se quedó a dos centímetros del corazón.
Tras la agresión, los autores de la misma huyeron del lugar sin que pudieran ser identificados ni detenidos en un primer momento. La Guardia Civil inició una investigación con los pocos datos que tenía del agresor. El caso lo llevó el equipo de Policía Judicial de la Guardia Civil de Carmona. Cuando los agentes lograron identificar a los sospechosos, descubrieron que éstos se habían marchado de sus casas para no ser detenidos.
Se habían escondido en casa de unos familiares en Sevilla capital. Esto obligó a la Guardia Civil a mantener una presión policial sobre los domicilios de parientes y amigos, que llevó finalmente al presunto autor material de las puñaladas, uno joven de 24 años, a entregarse en las dependencias de la Guardia Civil de Carmona. Después fue arrestado en Tocina el presunto encubridor, que fue la persona que aportó el arma blanca.
Ambos detenidos fueron puestos a disposición judicial. Se les imputa un delito de homicidio en grado de Tentativa y otro de encubrimiento.
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