A falta de seis días para la final de la Copa del Rey, todo el Valencia mira a Gonçalo Guedes. El portugués se retiró con molestias del partido del sábado ante Osasuna y todo apunta a que descansará mañana ante el Villarreal en la cita liguera.

El atacante valencianista acabó el partido con dolor en el cuello tras recibir un fuerte golpe y el diagnóstico es de que padece una pequeña contractura en las cervicales. En principio, esa molestia no le debe impedir llegar a tiempo para el duelo ante el Betis, aunque el portugués sí recibirá todos los cuidados durante la semana para que pueda participar en las mejores condiciones.

Guedes es un futbolista esencial para José Bordalás. El portugués ha participado en 36 partidos de esta temporada, 31 en la Liga y cinco de la Copa del Rey, en los que ha anotado 13 goles. En el campeonato liguero, además, es el máximo realizador del equipo con 11 dianas, las mismas que acumula Carlos Soler, aunque éste es el especialista para los penaltis.

Si Guedes será vigilado de manera especial en los próximos días por los recuperadores valencianistas, otro tanto ocurre con Gabriel Paulista. "Está bastante bien y confiamos en poder recuperarle y tenerle en la final porque es un jugador importantísimo para el equipo", aseguró el propio Bordalás hace unos días sobre el estado físico del central, que se retiró del partido ante el Rayo Vallecano con unas molestias musculares.

Desde entonces, Gabriel se puso a trabajar con los recuperadores del club para acelerar su regreso y el objetivo es que pueda participar el sábado en la final copera como jefe de la defensa ché.