Quedan 12 jornadas en esta carrera por la Champions del Betis con la Real Sociedad, fundamentalmente, el Villarreal y un Atlético que será el próximo rival verdiblanco tras el parón y que parece casi haber asegurado ya su billete para la próxima Liga de Campeones.

Al conjunto de Manuel Pellegrini le quedan seis partidos en el Benito Villamarín y otros tantos lejos de su estadio. Hacerse fuerte en casa será una de las claves de que pueda pelear por tal ambicioso objetivo, ya que recibirá a rivales de la zona baja ante los que no puede fallar como el Cádiz, el Espanyol, el Getafe o un Rayo que puede llegar sin ningún objetivo por los que luchar ya, además de a un rival directo como la Real Sociedad.

La temporada la cerrará el equipo en Heliópolis ante un Valencia que puede llegar jugándose la vida o con los deberes hechos. Para eso hay que esperar.

Lejos de Heliópolis el calendario parece más complicado, empezando por la salida al Metropolitano tras el parón con el Atlético de Madrid. La siguiente salida es a Pamplona frente al Osasuna, un campo siempre complicado, mientras que tras recibir a la Real Sociedad en una jornada intersemanal afrontará dos partidos a domicilio seguidos: contra el Barcelona y el Athletic. La siguiente salida será el derbi en la jornada 35 y la última a Gerona, posiblemente ante un rival que ya no tenga objetivos por los que pelar.

Con 45 puntos en el zurrón quedan 36 en disputa y la clasificación para la Liga de Campeones estará entre los 65 y los 70 puntos. No en vano, sólo en cinco ocasiones con al menos 63 puntos se logró la cuarta plaza desde 2005, cuando lo hizo el propio Betis. Las otras ocasiones fueron los 63 puntos del Sevilla en 2010; los 62 del Villarreal en 2011; los 58 del Málaga de Pellegrini en 2012; y los 61 en 2019 del Valencia. En la última década siempre fueron necesarios más de 13 puntos para entrar en la Champions.

Hacer pleno en casa acercaría al Betis a ese objetivo, pues serían 18 puntos más con los que ya alcanzaría los 63. Y algo sumará fuera, pese a las complicadas salidas, ya que el Girona puede no jugarse ya nada en la antepenúltima jornada o el Athletic estar a las puertas de la final de la Copa del Rey -juegan el 3 de mayo y si el conjunto vizcaíno remonta al Osasuna disputaría la final el 6 de mayo-.