La sociedad Fekir-Canales es la mejor garantía para el Betis

Nabil Fekir es un prodigio de técnica en control, conducción y pase. Lo volvió a demostrar en Balaídos, donde siempre necesitó un solo toque para dominar la pelota e iniciar los ataques. Con él a su lado, Sergio Canales también elevó su nivel ante un Celta que se fue enroscando con incomodidad, hasta el punto de que en el tramo final del partido, parecieron los gallegos quienes jugaban con un futbolista menos. Sólo Marchesín evitó que los verdiblancos pescaran al menos un punto muy merecido por su audaz reacción tras el descanso.

Fekir | El balón no tiene secreto alguno para él aunque acaba de reaparecer tras una lesión

El campeón del mundo tiene una personalidad tan arrolladora cuando juega, que ni siquiera el hecho de haber estado de baja en los cuatro partidos anteriores merma su protagonismo. Salió tras el intermedio, agarró la pelota compartiendo liderazgo con Canales y a su grupa se subió todo el Betis. Controló siempre de primeras, le dio a cada jugada lo que requería y sólo faltó que apareciera al remate.

Luiz Henrique | No parece maduro aún para trazar una línea de regularidad

El extremo brasileño dejó claro en el cuidado prado vigués que aún necesita tiempo para tomarle el pulso al fútbol europeo, en concreto español, con esa mayor intensidad del juego y de los marcajes. No entró en el partido y tampoco se lo facilitó Javi Galán, quien esta vez se centró más en labores defensivas para descentrar al bético con un marcaje expeditivo, algo que ya empieza a ser habitual en los pares que se encargan de intentar frenar al joven valor brasileño. Pellegrini trató de probar suerte un rato en la izquierda, pero tampoco. Aún le queda maduración.

Luiz Felipe | También comete sus errores, claro que sí

Había empezado el partido corrigiendo de nuevo a un compañero, esta vez Édgar, quien falló ante Carles Pérez en una banda y le dejó el camino a la portaría al atacante. Pero no estaba cómodo ante la calidad del gigante Larsen y quedó claro al equivocarse en un control orientado del noruego y facilitar su carrera hasta Rui Silva.

Canales | Acabó desquiciado con Soto Grado

No es habitual ver a Sergio Canales tan enojado como acabó el partido de Balaídos, muy quejoso por las decisiones del árbitro Soto Grado cuando el Celta tiró de dureza para cortar la reacción del Betis. Esa reacción vino en buena parte de sus botas y su mando. Con eso debe quedarse el bético: Canales es Canales.