Qué alimentos puedes tomar y cuáles debes evitar si padeces diabetes gestacional
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Existen alimentos que están totalmente prohibidos si se padece esta afección para garantizar la salud del bebé en el futuro.
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La diabetes gestacional es la diabetes que se diagnostica por primera vez durante el embarazo. Al igual que con otros tipos de diabetes, la diabetes gestacional afecta la forma en que las células utilizan el azúcar. Este tipo diabetes causa un alto nivel de azúcar en sangre que puede afectar tu embarazo y la salud del bebé. Las mujeres embarazadas pueden ayudar a controlar la diabetes gestacional consumiendo alimentos saludables, realizando ejercicio y, si es necesario, tomando medicamentos.
Los bebés de madres con diabetes gestacional tienen un mayor riesgo de padecer obesidad y diabetes tipo 2 en el futuro. En algunos casos, se puede producir la muerte fetal intrauterina, debido a que, la diabetes gestacional sin tratar puede provocar la muerte del bebé antes o poco después del nacimiento.
Pero para muchas futuras mamás esta afección es desconocida y no saben cómo atajar este problema, ni que alimentos deben añadir o apartar de su dieta.Pues bien, aquí deamos una lista para conocer los alimentos más adecuados, y cuáles evitar o limitar, para controlar tus niveles de glucosa.
ALIMENTOS A EVITAR EN LA DIABETES GESTACIONAL
En primer lugar, diremos que existen alimentos que se deben evitar en la mayor medida posible, pero pueden hacerse algunas excepciones. Eso sí, hay una norma que no puede conculcarse: el consumo de alimentos ricos en azúcares simples.
Al ser todos ellos alimentos de absorción rápida, provocan rápidas caídas de la glucosa. En realidad, son alimentos que no deberían formar parte de la dieta de ninguna embarazada, tenga o no diabetes, ya que proporcionan muchas calorías, y pocos o ningún nutriente. Estos incluyen:
- Azúcar refinado (el que echas al café, el empleado en repostería…)
- Miel
- Leche condensada
- Dulces, pasteles y bollería
- Caramelos y chocolate
- Refrescos y zumos azucarados
- Helados
- Platos precocinados
- Las barritas o los cereales de desayuno elaborados con arroz o trigo inflado, con miel o azúcar
2. Derivados de las frutas
Las frutas en almíbar, desecadas, y las mermeladas, contienen elevadas cantidades de azúcar. No se deben tomar tampoco zumos, aunque sean naturales, porque en el proceso se elimina la fibra que ayuda a controlar la glucemia.
3.Salsas
Hay que eludir las salsas como la mayonesa, alioli, salsa barbacoa, kétchup.. etc; sobre todo si son industriales porque suelen llevar azúcares agregados.
4.Alimentos fritos y rebozados
Las grasas elevan los niveles de glucosa, y por ello hay que elegir formas de cocinar que las reduzcan al máximo como la cocción, el papillote, el horneado u otros métodos.
5.Algunos lácteos
Los que contienen toda la grasa, como la leche o los yogures enteros, y los cremosos (tipo griego), de sabores o azucarados. Tampoco deben tomar postres lácteos industriales, como el flan o las natillas, ni quesos grasos y muy curados.
6.Carnes procesadas y muy grasas
Como la panceta, salchichas, morcilla, y los embutidos y charcutería ricos en grasa (chorizo, salchichón, salami, mortadela). Tienen, además, altas concentraciones de sal y azúcares agregados.
7.Pastas y cereales sin abusar
Los alimentos ricos en azúcares complejos, de lenta asimilación, son necesarios para obtener energía, pero sin abusar. En este grupo se encuentran:
- Legumbres
- Los cereales integrales (arroz, pasta, maíz, sémola, copos de trigo y pan integral)
- Patatas y arroz
8.Frutas, con cuidado, y más verduras
Se puede y se debe aumentar el consumo de las verduras, que son básicas en nuestra dieta mediterránea. La fruta también contiene azúcares simples que elevan de forma rápida la glucosa en sangre. Por eso, la gestante no se debe abusar de ellas.
Alimentos recomendados para la diabetes gestacional
- Cítricos: mandarinas, pomelo, naranjas, kiwi. Son frutas ricas en fibra, flavonoides y vitamina C, que refuerza el sistema inmunitario
- Hortalizas y verduras de hoja verde: espinacas, acelgas, crucíferas, apio, canónigos, diversas variedades de lechugas, zanahoria. Apenas aportan energía y en cambio son ricas en minerales y muchas sustancias beneficiosas. Además, su valor nutritivo se mantiene aunque las tomes congeladas.
- Cereales integrales: arroz integral, avena, pasta de trigo entero. Integrales, porque aportan hidratos de carbono de lenta absorción, que ayudan a controlar los niveles de azúcar en sangre.
- Frutos rojos: cerezas, fresas y frambuesas. Son refrescantes, jugosas y tiene un sabor dulce que hará que no eches de menos los clásicos postres.
- Tomate: Es digestivo, remineralizante y tiene propiedades antioxidantes
- Nueces: Ayudan a controlar la sensación de hambre, son ricas en ácidos omega 6 y aportan una dosis extra de magnesio y fibra.
- Yogur y leche desnatados: uno o dos yogures al día son recomendables para todo el mundo porque se digieren con facilidad, aportan calcio y ayudan a mantener en buen estado nuestra flora intestinal.
- Pescado azul: es muy nutritivo y rico en ácidos grasos saludables, hierro y vitaminas.
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