El error que cometes al comprar conservas de pescado en aceite de oliva, según una nutricionista: "No tiene sentido"

Las conservas de pescado son una excelente fuente de proteínas y grasas insaturadas y un aperitivo siempre listo para degustar. A los productos conservados al natural o en escabeche, cada vez es más frecuente ver en los lineales de los supermercados conservas en aceite de oliva. No obstante, lo que parece una alternativa saludable ideal para tu despensa, resulta un alimento ultraprocesado y con un gran déficit nutricional.

"¿Qué sentido tiene estar tomando un pescado en conserva si está bañado en aceite de oliva?", se pregunta Núria Coll, nutricionista y fundadora de la marca de productos ecológicos Como Como Foods. Y es que el aceite en que se conservan los pescados marca una pequeña gran diferencia en su calidad nutricional: ese aceite de oliva 'a secas' puede arruinar el producto.

El aceite de oliva de las conservas es, en realidad, aceite refinado en un 80% o 90% frente a una pequeña parte de aceite virgen. Se trata de un aceite al cual "se le han añadido disolventes y ha sufrido un proceso de decoloración", explica Coll. Este producto carece de antioxidantes naturales, vitaminas y compuestos fenólicos, lo cual no solo reduce su valor nutricional, sino también su sabor.

En este sentido, esta nutricionista recomienda "revisar que haya un subtítulo que ponga 'aceite de oliva virgen' o 'virgen extra', pero no aceite de oliva a secas" al comprar pescados en conserva en el supermercado. El aceite de oliva virgen extra es aquel que no ha sido refinado y conserva todas sus propiedades intactas. En su composición se incluyen antioxidantes naturales como la vitamina E o los polifenoles que nos protegen frente al envejecimiento celular o un aporte equilibrado de ácidos grasos omega-3 y omega-6.

Por otro lado, algunos pescados se conservan en aceite de girasol, otro aceite refinado con un alto contenido en omega-6. Entre sus desventajas presenta un desiquilibrio con el omega-3, lo cual puede favorecer procesos inflamatorios, e inestabilidad frente al calor, la luz o el oxígeno, lo que lo hace menos adecuado para conservar alimentos, según esta experta. "Lo que parece un simple detalle, es clave para tu salud", concluye Coll.

Beneficios de las conservas de pescado en AOVE

El aceite de oliva virgen extra actúa como un conservante natural de larga duración para cualquier pescado, lo cual potencia su sabor y enriquece su aporte nutricional:

• Aparte de una fuente de proteínas de alto cvalor, el pescado en conserva contiene vitaminas A, B, D y E y minerales como fósforo, hierro, calcio o yodo, imprescindibles en funciones básicas del organismo.
• Los pescados azules, ricos en ácidos grasos omega-3, ayudan a reducir el colesterol LDL, puesto que reducen la presión de los vasos sanguíneos.
• Se trata de un recurso económico, duradero y versátil, que permite su presentación en multitud de recetas y hace más atractivo el consumo de pescado.
• El aceite de oliva virgen extra de las conservas puede reutilizarse en ensaladas.