El Consejo de Hermandades de Sevilla ha zanjado la polémica suscitada con el cartel de la Semana Santa de 2024, obra de Salustiano García. Tras cinco días en los que este asunto se ha hecho un hueco hasta en medios internacionales (hasta ha cruzado el gran charco), la junta superior de la institución cofradiera considera oportuno valorar la situación internamente y no avivar más un debate del que se han hecho partícipes hasta políticos catalanes, como Gabriel Rufián. 

La postura del Consejo se ha evidenciado en el pleno de hermandades penitenciales celebrado el pasado miércoles, una sesión en la que se aprobaron las cuentas de 2023 y el presupuesto de este año. En dicha cita, los hermanos mayores de la Paz (Vicente Flores) y de los Estudiantes (Jesús Resa) aludieron a la gran polémica suscitada desde que el sábado se diera a conocer el cartel que anuncia la Semana Santa de Sevilla de 2024. Una obra muy distinta a las habituales de esta temática y protagonizada por la imagen de un Cristo Resucitado encarnado por el hijo de Salustiano García, autor del cartel. 

Pese a incluirse las potencias del Cristo del Amor y el sudario del Cachorro en su representación, no han faltado críticas por su desnudez y hasta por la pose que algunos consideran "afeminada". También ha habido partidarios que lo califican como una gran obra de arte, mientras que en un tercer grupo se colocan los que admitiendo la gran calidad del cartel, estiman que no se ajusta a lo encargado: anunciar la Semana Santa de Sevilla. 

Al hilo de las preguntas de los hermanos mayores mencionados, el presidente del Consejo, Francisco Vélez, afirmó que la valoración de lo ocurrido en el cartel pasa a ser una "cuestión interna", de la propia entidad, aunque reconoció que "puede no responder a lo que la gente esperaba". Frases con la que intenta zanjar un asunto que ha traspasado las fronteras nacionales y en el que la institución cofradiera no está dispuesta a echar más leña al fuego.