La Unidad de Trabajo Social del Hospital San Juan de Dios del Aljarafe atendió hasta junio 533 consultas, un 3,7% más que en el mismo periodo de 2021. De los pacientes atendidos, 376 se atendían por primera vez en la unidad y 117 se atendieron antes de las 72 horas del ingreso.

La gestión de casos relacionados con la Ley de Dependencia, así como aquellos en riesgo de exclusión social, constituyen un elevado porcentaje de las intervenciones sociales realizadas por las trabajadoras sociales del centro durante este periodo, aunque el listado de indicadores analizados es bastante amplio.

"En la identificación de estos indicadores de riesgo social, están implicados todos los profesionales que participan en el proceso asistencial del paciente, desde sus enfermeras y auxiliares, especialistas médicos, hasta llegar a nosotras. Esto es posible gracias a un circuito de intervención social que incorporó como novedad, la participación diaria de las trabajadoras sociales en las sesiones clínicas del servicio de Medicina, una metodología de trabajo pionera en Andalucía", explica Aurora Díaz, trabajadora social del centro.

"Este circuito nos permite identificar a pacientes con problemática social desde su ingreso, o bien pacientes que tras una enfermedad sobrevenida o que por su edad u otras patologías sufren deterioro en su funcionalidad para la realización de las actividades de la vida diaria, deben enfrentarse a una situación nueva y desconocida que implica la reorganización familiar y la búsqueda de apoyos para poder hacer frente a la nueva circunstancia de la persona afectada. Desde la Unidad de Trabajo Social, ayudamos al paciente y a su familia a la reorganización del sistema familiar, la búsqueda de apoyos y recursos sociales, con el objetivo de normalizar la vuelta a su entorno", afirma Maribel Angulo quien, junto a Maite Medina y Aurora Díaz, conforman la Unidad de Trabajo Social del Hospital San Juan de Dios del Aljarafe.

La historia social está integrada en la historia clínica, con una visualización rápida y directa del informe social, ubicado junto al informe médico y de enfermería, y los despachos, tanto de internistas como de trabajadoras sociales, se encuentran ubicados en la misma planta facilitando la accesibilidad entre los distintos profesionales. Es esta coordinación interna la que permite agilizar los tiempos de gestión y poder avanzar en las intervenciones sociales de aquellos pacientes que lo precisan.

Para completar el proceso de intervención social, junto al trabajo intrahospitalario, la coordinación con los dispositivos y trabajadoras sociales de Atención Primaria permite ahondar en la búsqueda de recursos para los pacientes y garantizar la continuidad asistencial de los casos.