La Fiscalía de Menores ordenó la puesta en libertad con cargos de los tres adolescentes detenidos hace unos días en Sevilla por su presunta participación en la violación a otra menor de edad. Los presuntos autores de la agresión sexual, a los que también se les imputa un robo con violencia, han quedado libres sin que se les haya impuesto ninguna medida cautelar, según informaron a este periódico fuentes del caso.

Los tres presuntos agresores tenían 14 y 15 años en el momento en que ocurrieron los hechos, en mayo de 2021. El caso no ha trascendido hasta ahora porque la víctima, que también tenía 15 años, había guardado silencio durante un año y medio. En diciembre de 2022, relató la agresión que sufrió a su hermano, después de que éste oyera que los presuntos autores iban contándolo por su barrio, el polígono de San Pablo de Sevilla.

El hermano animó a la joven a presentar una denuncia ante la Policía Nacional, cosa que hizo a finales del año pasado. El Grupo de Menores (Grume) de Sevilla abrió una investigación y pudo identificar, localizar y detener a los tres menores que habían participado presuntamente en la violación. A uno de ellos se le considera el autor material, mientras los otros dos ayudaban sujetando a la víctima.

La adolescente conoció a sus presuntos agresores en un centro comercial de Sevilla, donde se encontraba con una amiga. Los chicos convencieron a las dos jóvenes para que fueran con ellos a un descampado cercano, donde intentaron robarles. La amiga logró escapar alegando que había quedado con la madre y que tenía que irse, pues de lo contrario su madre la buscaría inmediatamente. Sin embargo, la otra joven no pudo zafarse.

Los tres menores le robaron presuntamente sus pertenencias y la llevaron hasta una casetilla de la luz abandonada, la misma en la que en verano de 2022 aparecieron los cadáveres de una pareja, en un caso que se tramitó como un crimen machista. Allí, uno de ellos la violó mientras sus amigos le ayudaban. 

La máxima condena que se le puede imponer en España a un menor de 14 ó 15 años por una agresión sexual es de cinco años de internamiento en régimen cerrado, complementada por otra medida de libertad vigilada de hasta tres años. También deberá imponérseles una medida de educación sexual y educación para la igualdad, según recoge el artículo 10.2 de la ley de responsabilidad penal del menor.