Seis horas después de que el líder de los socialistas andaluces, José Antonio Griñán, llamara al orden desde Madrid, la dirección del PSOE de Sevilla proclamó oficialmente su apoyo "sin fisuras" al secretario general andaluz. Es la reacción a la rebelión interna surgida en los últimos días que ha fracturado el partido, una situación que debilita la posición de Griñán, anfitrión del congreso federal donde se pretende "apuntalar" al PSOE de España.

Griñán advirtió ayer a Viera que lograr el consenso es su obligación y el secretario de los socialistas sevillanos no tuvo otra que acatar la orden. Sin comparecer públicamente, en señal de respeto al proceso asambleario que concluyó ayer con clara desventaja para los sectores críticos, Viera defendió su potestad para convocar la ejecutiva provincial extraordinaria que el lunes abrió la caja de los truenos y para rechazar cualquier presión a la hora de elaborar la candidatura que, parece seguro, estará encabezada por Griñán y Viera, además de miembros de las tres ejecutivas y representantes de los socialistas en las distintas instituciones.

Probablemente, esta tarde se convocará otra reunión de la ejecutiva provincial -en este caso se supone habitual- para informar de la propuesta de delegados que se elevará al congreso del sábado para su aprobación. Se entiende que en esta convocatoria se tratará de sacar una única lista de consenso para diluir otras opciones, aunque, al ser secreto el voto, el temor a que la fractura del partido se ponga de nuevo en evidencia se mantiene.

No obstante, la lectura de las votaciones en las asambleas apunta que las minorías y el sector crítico apiñado con Viera -y por extensión más afines a Rubalcaba que a Chacón- no son algo menor, pues superan el 60% de votos y que los virajes han sido puntuales. De hecho, hubo dos propuestas en la agrupación Macarena, controlada por los críticos, y éstos quedaron en minoría: 6 frente a 8 de una lista abanderada por Carmelo Gómez, próximo a la dirección regional. En esta misma línea irían las listas de Triana y San Jerónimo. Pero los militantes que simpatizan más con Rubalcaba ganaron en Nervión (por goleada), Bellavista, Cerro-Amate, Miraflores y Sur, además de en municipios como Alcalá de Guadaíra, Dos Hermanas o La Rinconada. En agrupaciones de la capital como Centro, Pino Montano o Alcosa-Este-Torreblanca hubo más integración.

Oficialmente, la dirección provincial lanzó ayer un mensaje de concordia, pero oficiosamente Viera se mantuvo en su postura y reivindicó su potestad para elaborar la lista final. Desde la suma y la cohesión. Ésta fue la frase que da a entender que finalmente en la lista de 55 delegados que se someta a la votación en el congreso del sábado contará con todas las familias; eso sí, previo acuerdo para desactivar cualquier intento de ruptura.

Viera se sentará la próxima semana con los elegidos para hacerles partícipes de cómo ha ido el proceso y analizar el congreso federal, pero respetando la libertad de voto para que puedan decantarse por Rubalcaba o Chacón. Antes tendrá que atrincherarse y capear con éxito el temporal, pues distintos sectores coinciden en que su puesto está ya amortizado, aunque la dirección aseguró ayer que distintos cuadros del partido avalan su trayectoria. Y, sobre todo, debe ir de la mano del líder andaluz. Para despejar dudas, la agrupación de Nervión, donde ahora milita Griñán, aprobó ayer una resolución en su apoyo, un gesto quizás innecesario o inadecuado, pues destapa una debilidad que el PSOE no necesita.