Julio fue flojito, comenta el presidente de los hoteleros sevillanos, Manuel Cornax que, a espera de cerrar los datos de agosto, augura que la ocupación media se sitúa en Sevilla este verano en torno al 45-47%. El porcentaje sigue siendo bajo si se compara con el 60% de ocupación registrado en años previos a la pandemia en una época que, no obstante, es temporada baja. 

En la misma línea se manifiestan las agencias de viajes. "El verano de 2021 está siendo, como es lógico, mucho mejor que el de 2020, pero sigue lejos de las cifras de 2019", apunta José Manuel Lastra, presidente de la asociación de agencias de viajes de Sevilla.

Ya en junio se observó en la capital una tendencia que se mantiene. Y en ese mes el turismo nacional cayó sólo un 18% mientras que el tráfico internacional siguió lejos de la normalidad, con un 78% de diferencia respecto a 2019.

El turismo nacional está salvando la temporada, apunta también Gustavo de Medina, presidente de la patronal de las empresas turísticas, Aset. Los turistas nacionales están favoreciendo ocupaciones en la costa de hasta el 80%, añade, pero el internacional todavía está por llegar. Francia y Portugal son los mercados emisores que mejor están funcionando, comenta Lastra, aunque todavía muy lejos de la normalidad.

La puesta en marcha, a primeros de julio, del certificado digital europeo supuso un cierto incremento de las reservas, pero muy pronto se vieron frenadas ante el avance de la quinta ola de contagios. "El lado bueno está en que las agencias observamos un aumento de interés por parte de la ciudadanía, dada la seguridad y el asesoramiento que aporta un profesional, en tiempos como los actuales en los que dichos atributos son cada vez más valorados. Ello nos lleva a pensar que, en el momento en el que por fin se den las circunstancias adecuadas, con la mayoría de la población vacunada, nuestra actividad se incrementará de manera importante", confía Lastra. Pero son ya casi 18 meses con una caída descomunal de los ingresos, superior al 85% en muchos de esos meses, y la huella en las empresas es muy grande. "Lamentablemente, no estamos encontrando en nuestras administraciones, principalmente en la autonómica, los apoyos y las ayudas que si están teniendo lugar en otras regiones españolas", critica.

Sin duda, la mejora se debe fundamentalmente al turismo de proximidad. Las agencias de viajes destacan que el bono turístico está funcionando positivamente y que está incentivando el movimiento de sevillanos también por Andalucía. Pero insisten en la necesaria agilización de los trámites burocráticos para que este bono sea efectivo.

En cualquier caso, el ambiente ya es de recuperación en Sevilla. Los datos de visitas a uno de los principales monumentos, el Alcázar, son esperanzadores. Las cifras han ido multiplicándose desde el pasado mes de enero, con 10.120 visitas; y julio fue especialmente bueno con 73.914, duplicando con creces las visitas del año pasado. Y sólo en los 19 primeros días de agosto casi se ha igualado el volumen de dicho mes completo en 2020. En total, este año han pasado ya por el monumento 285.297 personas.

Las previsiones que manejan en el sector apuntan que el otoño traerá un importante incremento de turistas europeos y que la larga distancia empezará a recuperarse en 2022. Aunque Cornax es más escéptico y aseura que el otoño, a día de hoy, es una incógnita.