El Ayuntamiento, en un proyecto coordinado por Emasesa, Hábitat Urbano, Distrito San Pablo-Santa Justa, Movilidad, Salud y la Universidad de Sevilla, ha comenzado ya la tercera y última fase de la transformación integral de la Avenida del Greco.

Tras culminar en noviembre las obras en el acerado sur de esta vía, se han iniciado en su acerado norte, que se prolongarán hasta marzo próximo, conforme al plazo de 10 meses previsto para la culminación de este proyecto. En estos meses se colocará también el mobiliario y la jardinería del acerado sur.

El Consistorio asegura que es “la obra con mayor participación, diálogo y transparencia que se ha realizado hasta ahora en la ciudad”.

Vista de la Avenida del Greco desde el extremo opuesto a Kansas City.

Se ha construido uno de los aljibes del pionero sistema de drenaje sostenible, que acumulará agua de lluvia. Se plantarán 90 árboles más de los que hay (un aumento del 72% con respecto a la arboleda existente) y 2.000 m2 de jardineras y zonas verdes.

Habrá juegos infantiles, aparatos biosaludables para personas mayores, una zona de agua con una fuente ornamental frente al centro de salud y tres puntos con fuentes de agua potable que contribuirán a la presencia del agua como elemento paisajístico.

La vía tendrá 65 bancos, nuevas papeleras y áreas de aparcamiento para bicis. Como novedad, se ha incorporado la dotación de un punto abierto wifi junto al centro de salud.

“Estas obras marchan según los plazos previstos, programados y presentados a los vecinos y vecinas y comerciantes antes del inicio del proyecto y conforme avanza la ejecución. Asimismo, la interlocución y el diálogo son constantes en la zona desde que se planteó una iniciativa que supondrá un antes y un después en la concepción del urbanismo de la ciudad y en la participación ciudadana en el mismo”, comentó la delegada del Distrito San Pablo-Santa Justa, Inmaculada Acevedo. 

Se van a generar, asimismo, nuevos espacios para el peatón en este rediseño, que también incluye la reubicación del carril bici. La vía pasará a formar parte del grupo de calles en los que se ha limitado circulación la circulación a los 30 kilómetros/hora a través de diversas medidas de pacificación y calmado del tráfico.

Esta actuación, “construye una avenida más habitable a través de novedosos espacios de convivencia”, según Acevedo. El presupuesto es superior a 2,5 millones de euros.