Los dos policías nacionales y el guardia civil detenidos el jueves en Sevilla cayeron en una operación en la que se intervinieron 365 kilos de cocaína. La droga estaba oculta en un camión que se halló en una nave industrial de Carrión de los Céspedes. La redada se ha saldado con ocho detenidos en total, que está previsto que pasen este sábado a disposición judicial.

La operación la dirige el juzgado de Primera Instancia e Instrucción número 5 de Sanlúcar la Mayor. Sobre el terreno, ha sido desarrollada por dos grupos de la Policía Nacional desplazados desde Madrid para ello. Son la Unidad de Drogas y Crimen Organizado (Udyco) central y la de Asuntos Internos. Los investigadores hallaron el camión sin carga, con la droga oculta en su estructura.

El vehículo estaba realizando un transporte de la droga entre Algeciras y Málaga. No ha trascendido el motivo por el que se desvió hacia Carrión, ni tampoco qué papel jugaban los agentes dentro de la organización desmantelada. Parte de la operación se ha desarrollado también en Dos Hermanas. 

Dependiendo de la pureza, la mercancía decomisada tiene un valor que oscilaría entre los 18 y los 22 millones de euros. Se trata de uno de los alijos más importantes de cocaína en la provincia de Sevilla en los últimos años. Entre el resto de los detenidos hay varios sevillanos y también una persona de origen iberoamericano.

Ninguno de los agentes detenidos estaban destinados en unidades antidroga. Uno es un subinspector de la Unidad de Familia y Atención a la Mujer (UFAM) y el otro un policía de la Brigada de Seguridad Ciudadana. Ambos residían en la misma vivienda. El guardia civil también realizaba trabajos de seguridad ciudadana en la provincia de Sevilla.