El tironero de Ciudad Jardín, Raúl C. M., tenía 12 antecedentes en su historial delictivo. La mayoría de ellos eran por robos con violencia e intimidación, pero en una ocasión fue detenido por intentar violar a una menor de 13 años. El pasado miércoles, arrastró por el suelo a un matrimonio de octogenarios al que quiso robar asestando un tirón al bolso de la mujer, y también causó lesiones a tres ciudadanos que socorrieron a las víctimas y lo retuvieron hasta que llegó la Policía.

El juzgado de Instrucción 8 de Sevilla, en funciones de Guardia de Detenidos, decretó el ingreso en prisión comunicada y sin fianza del tironero. Este periódico publicó el pasado sábado por error que el sospechoso había quedado en libertad. La Fiscalía solicitó el ingreso en prisión provisional y el juez así lo decretó al existir motivos suficientes para responsabilizar a Raúl C. M. del delito.

No era la primera vez que este delincuente se enfrentaba a la Justicia. Hace diez años, en agosto de 2010, fue detenido en Sanlúcar de Barrameda, donde se le acusó de apartar a la víctima de sus amigas y llevarla a punta de navaja hasta un lugar discreto detrás de un coche. Según el relato policial de los hechos, allí intentó penetrarla y no lo consiguió. Terminó masturbándose delante de ella y eyaculando en sus ropas. Durante todo el tiempo que duró la agresión, la pinchó con la navaja.

Al año siguiente fue detenido por robar un ciclomotor con tres cómplices. El resto de antecedentes son por robos con violencia, la mayoría de ellos a punta de navaja, lo que se conoce en el argot policial como sirlas. Sobre las doce del mediodía del pasado miércoles 26 de agosto, iba con una bicicleta cuando abordó por la espalda a dos ancianos de 83 años que paseaban por la avenida de Ciudada Jardín. Trató de robarle el bolso a la mujer mediante el método del tirón. La pareja de ancianos resultó herida al ser arrastrada varios metros por el suelo.

Una pareja de ciclistas que fue testigo de los hechos auxilió a las víctimas. El delincuente los derribó a patadas, causándoles también lesiones. Finalmente apareció otro joven en bicicleta y entre los tres ciclistas consiguieron retener a duras penas al presunto autor de los hechos. Por suerte, un patrullero de la Policía Nacional pasaba en ese momento por la avenida y detuvo al sospechoso, que ya está en la cárcel.