El choque de este sábado en el estadio Nuevo Los Cármenes de Granada será especial para uno de los delanteros del Sevilla, Carlos Fernández, que regresa a la ciudad nazarí donde la pasada temporada explotó como un delantero de futuro en el concierto nacional.

Otra cosa son sus opciones de ser titular, ciertamente escasas pese a que Luuk de Jong y En-Nesyri aún no han regresado de jugar con sus selecciones y no han trabajado durante la semana a las órdenes de Julen Lopetegui. Pero sí tendría opciones el espigado delantero de Castilleja de Guzmán de disputar algunos minutos en el transcurso del partido como tuvo la ocasión de hacer en el Camp Nou ante el Barcelona, aunque fueron escasamente unos diez minutos.

Carlos Fernández regresa al estadio en el que ha experimentado su mayor crecimiento como profesional y ante el entrenador que lo ha sido todo para él, Diego Martínez, quien lo hizo debutar siendo casi un juvenil en Segunda División A con el Sevilla Atlético y que lo ha convertido en futbolista de élite en el Granada. El goleador zurdo ha levantado el interés de equipos importantes que en el pasado mercado de fichajes trataron de negociar con el Sevilla su traspaso, casos de la Real Sociedad o el Celta en España, y otros equipos fuera, como en Portugal (Benfica), en algún club de la Premier League y en Alemania.

Con 17 goles en total la temporada pasada (14 en la Liga), el canterano y ex internacional sub 21 protagoniza otro rol diferente en la plantilla del Sevilla, de la que estuvo cerca de salir en el último día del mercado con una especie de acuerdo de trueque (aunque en operaciones distintas) con la Real Sobciedad por Willian José.

Carlos Fernández será una opción para Lopetegui a lo largo de una temporada que se antoja larga e intensa, aparte de muy exigente para los sevillistas con su participación en la Champions y en dos competiciones más como la Liga y la Copa del Rey, en la que llegó a semifinales con el Granada.