La vuelta a una normalidad relativa es ya un estímulo para los futbolistas del Sevilla FC, que acudieron este miércoles a la ciudad deportiva para realizarse los test para descartar casos positivos de coronavirus y que entre el viernes y el sábado, si todo va bien, podrán volver a entrenar sobre un campo de fútbol.

En este sentido, Sergi Gómez ha expresado sus sensaciones en los medios del club y espera y desea que pronto pase esta pesadilla. "El hecho de coger el coche y hacer el camino habitual se hizo raro. Han sido dos meses, más de las vacaciones que tenemos en verano. Teníamos muchas ganas de vernos allí, pero ya una vez que llegas y te esperan con mucho protocolo y manteniendo las distancias pues se hizo todo muy raro. Teníamos un mapa con todas las fases que teníamos que ir cumpliendo, no había margen de error, estaba todo perfectamente planificado. Se pueden hacer las cosas bien hechas, fue un claro ejemplo", ha expresado en los medios oficiales el jugador catalán.

Para el ex jugador del Celta, éste fue un paso decisivo para que se vuelva a jugar al fútbol. "Es un paso adelante. Nos quedan unos cuantos aún si finalmente se consigue jugar de nuevo, pero ya estamos ahí en nuestro hábitat aunque sea a distancia. Toca empezar a trabajar de forma individual y veremos cómo va siendo. No va a ser igual que estando todos juntos pero hay que adaptarse. El que mejor lo haga va a ser el que va a triunfar", manifestó.

"Nosotros está claro que si hay contacto estamos expuestos, pero se están siguiendo las medidas de seguridad y de sanidad lo más minuciosamente posible. Puede haber cosas incontrolables un desliz, por eso estamos así en todo el mundo. Cuanto más controladas estén las cosas que sí que puedes controlar, mejor va a ser para todos", añadió el defensa.