El Sevilla, viva imagen de la precariedad, visita al Celta
Celta-Sevilla | La previa
El equipo de Jorge Sampaoli retoma su peliagudo presente liguero con la obligación de sobreponerse a las nueve bajas y dar la cara ante el Celta para salir cuanto antes del lodazal
El Sevilla de la hora es la vivísima imagen de la precariedad. Por su delicada situación tras catorce jornadas, hundido en la zona de descenso; por la tormenta institucional cuyas ondas, se quiera o no, zarandean al equipo; y por el mermado potencial con que acude a Vigo una plantilla de por sí cogida con alfileres por la ilógica y errática planificación que ha perpetrado el director general deportivo, el reputado Ramón Rodríguez Verdejo, Monchi.
Todo es temblor, languidez, debilidad en el nido sevillista. A tal extremo llega el presente del club con el cuarto presupuesto del fútbol español, que Jorge Sampaoli se apresuró el pasado miércoles a anticipar una lista de 21 convocados harto llamativa. Y para nada parida por el capricho: lo que hay es lo que hay. Sólo trece jugadores con ficha de la primera plantilla se subieron al avión con destino a la inquietante pista de aterrizaje del aeropuerto de Vigo-Peinador. Los otros ocho jóvenes que completaron la relación de 21 citados tienen ficha del colista del Grupo IV de la Segunda RFEF, que es el Sevilla Atlético y que, para no ser menos que sus hermanos mayores, también suma 11 puntitos, aunque con un partido más.
A José Ángel Carmona y Kike Salas, ya habituales en las convocatorias e incluso los equipos iniciales esta temporada, se unieron el portero Alberto Flores, Manu Bueno, Hormigo, Carlos Álvarez, Pedro Ortiz y Nacho Quintana.
¿Cabe más precariedad? Complicado. El propio Sampaoli, en su rueda de prensa de ayer, reconoció que su margen es estrecho para darle un giro a la historia del partido con las sustituciones.
Y aún pudo ser peor para el Sevilla si Marcos Acuña no retorna con esas ganas de renovar su compromiso. El campeón del mundo, con sólo dos entrenamientos, va a ser de la partida cuando lo normal es que hubiera entrado poco a poco tras la montaña rusa de gozo de la que se acaba de bajar.
También En-Nesyri se viste de corto después de contadas sesiones en Sevilla. Y tanto Lamela como Suso se han recuperado a tiempo, pero como reconoce el propio Sampaoli, darán en Balaídos los minutos de calidad que puedan dar.
Con las consabidas bajas de esos defensas de cristal que atienden por Marcao y Rekik, más la del sancionado Nianzou, de nuevo va a tener que actuar en el eje de la zaga Nemanja Gudelj, ese jugador que ha pasado de actor secundario a protagonista por las circunstancias. Y Kike Salas, que cuajó un buen segundo tiempo en el último partido de Liga ante la Real Sociedad en Nervión, se perfila como su acompañante en el corazón de la defensa.
Por los flancos, poco que especular: Jesús Navas no tendrá competencia hoy ni en el próximo partido de Liga ante el Getafe, que son los partidos de sanción que le quedan a otro campeón del mundo, Gonzalo Montiel, por su incontinencia verbal en el último derbi en el Benito Villamarín. y en la izquierda, varado Alex Telles por su grave lesión en el Mundial, Acuña va a forzar.
En la medular, la presencia después de mucho tiempo en la Liga de Fernando Reges templa los ánimos, aviva la confianza. Junto a él estarán Joan Jordán y probablemente Óliver Torres: la baja del sancionado Rakitic acorta las alternativas. Y arriba Lamela, Carlos Álvarez y Rafa Mir pueden ser los llamados a darle al ataque la verticalidad y la pólvora que tanto echa de menos.
Carlos Álvarez ha dado respuestas positivas en ese fútbol que eso sí, tiene un cariz engañoso, el de los amistosos. Se ha ganado un voto de confianza, sea de enganche o incluso de falso nueve, y no sería de extrañar que Sampaoli le dé la titularidad en un partido de esta relevancia.
Porque relevancia, la tiene toda el pleito de hoy. El Celta, precisamente, marca la línea de la permanencia con un punto más que los sevillistas: si éstos ganan van a salir del lodazal de los puestos de descenso, pero ojo, que si pierden, se puede abrir una pequeña brecha con la salvación.
Y a diferencia del Sevilla y sus nueve bajas, el Celta de Vigo cuenta con todos sus efectivos. El entrenador portugués Carlos Carvalhal podrá alinear su mejor once bajo ese sistema 5-3-2 que ha dado cierta solidez a los celestes.
La temporada pasada, el equipo de Nervión arrancó un 0-1 de Balaídos en uno de tantos partidos con fútbol a cuentagotas. Las llegadas fueron contadísimas, pero en un rebote el balón le cayó a Rafa Mir para marcar a placer. Hoy, Jorge Sampaoli ve que el equipo mejora en el plano colectivo y se esperanza con jugar bien. Aunque no le haría ascos a ganar como lo hizo entonces el bloque de Lopetegui. Es crucial hacerlo como sea. Crucial.
No hay comentarios