Accionistas Unidos promueve una gran manifestación del sevillismo por la ciudad
La plataforma minoritaria también pide un "consejo de salvación" y se une a las movilizaciones que impulsaron los Biris Norte este domingo en el estadio
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El sevillismo podría volver a tomar las calles de forma masiva como ya hiciera de forma pionera en España el 2 de agosto de 1995. Este club y esta afición, tantas veces a la vanguardia del fútbol español para las cosas positivas y a veces también para las negativas, necesitan una catarsis absoluta porque viven la peor crisis del siglo XXI y una de las peores de su secular historia. Y Accionistas Unidos propone una gran movilización que trascienda lo que acontezca este domingo en el Ramón Sánchez-Pizjuán: una gran manifestación por la ciudad del sevillismo.
La razón no es otra que buscar una solución a esta grave situación de lo que entiende la plataforma minoritaria de accionistas (AU) debido a la deriva accionarial y a la política del actual consejo de administración. Por ello realiza varias propuestas como crear lo que llama un Consejo de Salvación que desbanque al actual consejo o unirse a las movilizaciones impulsadas por Biris Norte para este domingo como no entrar en el estadio hasta después del descanso del partido Sevilla-Real Madrid. Pero sobre todo destaca esa manifestación.
El 2 de agosto de 1995, en plena canícula y durante el inicio de las vacaciones de miles de sevillanos, el sevillismo se echó a la calle a instancias de un particular que intervino el 1 de agosto en la radio. En una encuesta callejera realizada por Radio Sevilla sobre el descenso administrativo que se había conocido ese 1 de agosto debido al impago del aval para inscribir al equipo en la Liga, un sevillista anónimo convocó a una gran manifestación. Sin redes sociales ni teléfonos móviles cerca de 35.000 aficionados se dieron cita para recorrer la ciudad desde el estadio hasta la Plaza Nueva en una movilización espontánea y sin precedentes.
La movilización del sevillismo más la acción de diversas personalidades y administraciones salvó al Sevilla del descenso a Segunda División B. El club estaba presidido entonces por Luis Cuervas, cuyo vicepresidente era José María del Nido Benavente. El periodista José María García también hizo mucho por que Antonio Baró, presidente de la LFP entonces, se desdijera y diera marcha atrás tras su enfrentamiento con la directiva de Cuervas y Del Nido por aquel impago.
Sevillistas ilustres como Jesús Rodríguez de Moya y Eduardo Romero también pusieron mucho para que se realizara el pago del aval y se encauzara aquello. De camino el Celta, el otro descendido, también fue readmitido en Primera División (pasó a tener 22 equipos) después de que se manifestasen en Vigo unos 3.000 celtiñas siguiendo el ejemplo del sevillismo.
Ahora el Sevilla no afronta un descenso administrativo, pero la situación es urgentísima después de tres avisos consecutivos de peligro de descenso de categoría por la vía deportiva y el déficit acumulado durante cuatro ejercicios económicos de 167 millones de euros. Esto no puede continuar así y Accionistas Unidos piden actuaciones drásticas desde ya.
Las tres propuestas de AU son las siguientes:
- Crear un consejo de salvación ya, compuesto por sevillistas eficaces y productivos, sin capital extranjero, que reformule completamente la gestión del club. Desde AU-SFC entendemos que el SFC se fortalece desde la unión y con las aportaciones de todo el sevillismo, especialmente de aquellos profesionales reputados, con capital, que pueden dar un giro de 180º a la gestión económica, deportiva y social. Es urgente terminar con el Pacto por la Pasta y sacar a la entidad de los juzgados para meterla en Champions League.
- Movilizar al sevillismo. Promoveremos una reunión con Biris Norte, Federación de Peñas Sevillistas, Asociación de Pequeños Accionistas y Patrimonio Sevillista, para movilizar a todo el sevillismo de base a que participe en una manifestación multitudinaria por la ciudad, solicitando el final del actual consejo de administración, poner fin al nefasto mandato de la actual dirigencia del club, y la llegada de un nuevo proyecto riguroso, eficaz y ganador.
- Apoyo a Biris Norte. La afición, una vez más ha sido un factor determinante, para que el SFC haya podido conservar la categoría. Y en ese sentido, Biris Norte ha jugado un papel de liderazgo transcendental que queremos públicamente agradecer. En ese sentido, apoyamos las medidas que BN ha anunciado para el próximo partido en el RSP.
La plataforma minoritaria no hace estas peticiones de forma caprichosa sino que las argumenta con una serie de razones bien fundamentadas. Así lo explica en su comunicado que titula con la frase "el Sevilla necesita ya un Consejo de Salvación". Es su principal petición: desplazar al actual consejo y que lo releve otro provisional.
El comunicado de Accionistas Unidos
Casi terminada esta aciaga temporada, Accionistas Unidos del Sevilla FC (AU-SFC) hace balance de la misma y manifiesta que ha sido un desastre absoluto en lo social, deportivo y económico con unos responsables claros.
En lo societario, Accionistas Unidos intentó durante tres meses sentar a los máximos accionistas para generar un consenso constructivo que mejorase la gestión de la entidad, y ellos mismos lo bloquearon. Por tanto, se posicionaron contra el interés general del club, y frente a la necesaria UNIDAD, para salvar al club. Con el diálogo roto es imposible salir de este atolladero.
El Sevilla FC no puede seguir dirigido por el actual Consejo de Administración que está amortizado, igual que está vencida y caducada la actual composición accionarial del club, por consiguiente, solo un cambio radical en estos estamentos permitirá resurgir al club. Lo que conlleva la compra-venta de acciones para arrancar de nuevo sin rémoras en la visión, proyección y gestión del club.
En lo deportivo la temporada ha sido muy decepcionante estando el club con posibilidades de descenso hasta la jornada 36. Cinco meses sin ganar en nuestro estadio. Pésimo rendimiento de la plantilla por una falta evidente de gestión deportiva. Excesivas decisiones erráticas que solo se pueden cambiar con la salida del Director Deportivo y parte de su equipo.
En lo económico, el club está hundido tras las pérdidas acumuladas en los últimos ejercicios, empeorando cada temporada la calidad de la plantilla debido a la reducción del límite salarial (los últimos de la LFP), con un modelo conómico de riesgo, porque un alto porcentaje de los ingresos depende de la venta de jugadores y se pierde capital humano con la salida gratuita o cesiones con altísimos costes por la ineficacia de la directiva.
Después de estas argumentaciones realiza las tres propuestas susodichas. Este domingo alzará la voz el sevillismo. El consejo de administración debe actuar en un sentido u otro. Porque su absoluta pérdida de credibilidad no tiene vuelta atrás: es irreversible. Y el Sevilla necesita soluciones.
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