Guía de los Patios de Córdoba: Aceite, 8

La historia de Aceite, 8 es consustancial a la vida de la familia de José Antonio Espinosa y Carmen Lopera y se remonta a hace cuatro décadas, a cuando adquirieron esta enorme antigua casa de vecinos de 600 metros cuadrados que entonces estaba derruida en el barrio de Santiago y que llegaron a compartir hasta una decena de familias. Tras esa adquisición Aceite, 8 se convirtió en la obra maestra de José Antonio Espinosa. Este profesional de la construcción, “albañil desde los 15 años”, quien la transformó en un lugar de película. La casa de José Antonio Espinosa cuenta con tres patios –el de los chinos, el de las orzas y el de la piscina–.

El primer patio, con una llamativa fuente y plantas verdes espectaculares, se llama así por contar con suelo de típico chino cordobés. El segundo es el que quizás más parece un patio típico cordobés, con arcos de ladrillos cegados y detalles como el pavimento tradicional. Y el tercero, el de la piscina, que parece el escenario de la película de Billy Wilder El crepúsculo de los dioses, es asalvajado, en él reinan a partes iguales la anarquía vegetal y la arquitectónica con plantas y árboles de gran porte. Es tan singular que uno de sus árboles, una palmera, fue premiada por el Real Jardín Botánico. Cuando se visita Aceite, 8 se echa de menos a Carmen, quien ya no está entre nosotros y que siempre recibía con una sonrisa.