El 'Telediario' estrena un plató parecido al de Antena 3

RTVE emprende desde esta noche una renovación de imagen del Telediario con la que espera arañar espectadores para recuperar el liderazgo de audiencia que ha perdido a lo largo de esta temporada. Los informativos de La 1 estrenan hoy un nuevo plató presidido por dos pantallas gigantes, en un estilo iniciado hace casi tres años por Antena 3. Los colores blancos y azules siguen siendo la marca del Telediario, pero ahora en un soporte al que se le ha imprimido más espectacularidad visual para subrayar las propias piezas informativas. Ya en la información meteorológica, lo más visto de los contenidos de este género de la cadena pública, se instalaron las pantallas gigantes que vinieron a sustituir los chromas, técnica ya obsoleta.

La nueva dotación, con esas dos pantallas gigantes móviles que también mostrarán aspectos en 3 dimensiones, ha costado 120.000 euros, una cantidad relativamente asequible, para remozar la imagen de unos Telediarios de los que su máximo responsable, Julio Somoano, se queja de que deben sufrir el lastre de las cifras de audiencia de los programas del corazón que les preceden. Somoano ha pedido otros contenidos como antesala de las ediciones de los días laborables conducidas por Pilar García Muñiz, en la sobremesa, y la veterana Ana Blanco en la nocturna.

La cabecera y la sintonía de los Telediarios también se renuevan y son una evolución de la que emprendió la última etapa de Fran Llorente, antecesor de Somoano hasta la llegada del presidente Leopoldo González-Echenique.

Somoano estrena plató y también se encuentra con problemas en el seno de su cúpula directiva. La hasta ahora jefa de Sociedad, Cristina Alcaine, ha abandonado su cargo y desde esta semana se prepara para reincorporarse al centro territorial de Canarias. En esta sección de Sociedad es donde se produjo la mayor protesta de los redactores en la encuesta realizada por el Consejo de Informativos. El 84,6% de este equipo no se sentía a gusto en sus quehaceres y la mayoría de ellos mostraron la queja de sufrir presiones políticas. Somoano estaría reestructurando en estos días dicha sección y otros equipos de su responsabilidad. En el sondeo realizado entre los trabajadores de informativos cundía el desánimo y el malestar.

Mientras el futuro de González-Echenique está en el aire, ya que habría transmitido su petición de salida a su aval, la vicepresidente Soraya Sáenz de Santamaría, las cifras económicas vendrían a confirmar el mal año 2013 vivido en RTVE.

El presidente de la corporación vino a calcular en septiembre pasado que los números rojos del ejercicio no iban a rebasar los 100 millones, cifra que podrían estar barajándose en estos momentos, sumándose así a los casi 113 millones de déficit que arrojó el balance de 2012, cuya mitad fue gestión de González-Echenique tras relevar a un desastroso período interino asumido por el consejo de administración. RTVE podría tener ya una deuda cercana a los 400 millones.