Carmen Calleja

Wert, de nuevo

valor añadido

29 de mayo 2012 - 01:00

DEBE ser la primera vez en la historia: todos los rectores de España dan plantón al ministro. Representan a las universidades públicas y privadas y, como es obvio, son personalidades de todo el espectro ideológico. Sostengo que el ministro Wert, por ser el más alejado del aparato del PP, siempre quiere manifestar su fe en el ideario de la derecha con la fuerza de los conversos. Se muestra más a la derecha que cualquiera y, sobre todo, usa los más autoritarios métodos. Los rectores pedían debatir sobre el RD-Ley, ya ley, de recortes en materia de educación. Algo de gran actualidad, no sólo porque acaba de aprobarse, sino también porque necesita el desarrollo por normas reglamentarias.

Wert consideró que no tenía nada que hablar, y menos aún negociar, con quienes tendrán que aplicar su nueva normativa. Es verdad que los rectores ya se habían pronunciado en contra de unas medidas nada dialogadas y tan strongly agressive como lo fue la reforma laboral. Al final, Wert ha tenido que volver a convocar la reunión incluyendo el punto a debatir que solicitaban los rectores.

La universidad española cuenta también con sus consejos sociales, órgano que debe aprobar toda decisión de carácter económico y elevar a la Administración las que, de esta naturaleza, necesiten aprobación superior. Hasta ahora son pocos los consejos sociales que se han pronunciado al respecto, aunque sin duda lo debatirán en sus próximas sesiones.

En Andalucía los presidentes y secretarios de consejos sociales se agrupan en el Foro de los mismos. La semana pasada hubo reunión del Foro, se debatió el asunto y se redactó un documento poniendo en evidencia los graves problemas que el famoso RD-Ley trae y también las medidas que a nivel andaluz se van a tomar para que el impacto de los recortes no sólo sea el menor sino que se reparta de la manera más equitativa posible. Destinar el ingreso del mayor precio de las matrículas a becas, lograr mayor eficiencia en el gasto y que esas cantidades minoren el recorte, etcétera, son actuaciones que, en consenso con los rectores, protegerán a la Universidad en Andalucía. Tres presidentes se oponen a que se difunda el comunicado del Foro de apoyo a la Universidad y de rechazo de los recortes indiscriminados y aplicados a un sector, el universitario y educativo en general, que debería ser de los últimos en una escala de prioridades de recorte de gasto. Tienen sus razones.

La semana próxima se reúne en Madrid la Conferencia de presidentes y secretarios de todas las universidades españolas, el equivalente al Foro en Andalucía. Esperemos que se oiga su opinión con igual fuerza que la de los rectores. Los rectores han sido la vanguardia. ¿Qué serán los consejos sociales?

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