Helena Arriaza

Una odisea

Pantalla táctil

15 de agosto 2016 - 01:00

SEGUIR los Juegos Olímpicos en RTVE es toda una odisea. No debe ser fácil cubrir el evento deportivo por excelencia. Hay errores que se comprenden y otros que no tienen nada que ver con el ente público. Pero hay un aspecto en el que están fallando y con el que están impidiendo que se disfrute de las competiciones: La programación. Para ver las pruebas no se sabe qué cadena poner, si La 1, La 2 o Teledeporte. Lo peor es que si se consulta la programación, esta tiene poco que ver con lo que luego deciden emitir. El miércoles por la noche en Teledeporte iban a emitir la final de gimnasia artística masculina y en La 1 el partido de las chicas de vóley playa femenino. A última hora decidieron que era mejor cambiar lo uno por lo otro y los espectadores o hacemos zapping para enterarnos de los cambios o nos quedamos sin ver lo que queremos. Las repeticiones de algunas pruebas mientras hay otras en curso es otra práctica demasiado abundante estos días. Cuando no hay nada en directo es lógico que repasen la jornada con reposiciones. Pero si hay competiciones que en ese momento están teniendo lugar, ¿para qué repetir y más cuando se trata de derrotas españolas? Todo esto por no hablar de los cortes que hacen en mitad de los momentos más interesantes de las pruebas, dejando a los espectadores con la miel en los labios. Ahí se genera el caos, el cambio de canal para ver si se encuentra en otro, coger el móvil para verlo a través de la aplicación, abrir el ordenador para mirar si lo están retransmitiendo por la página web. Estresante. Tampoco es comprensible que emitan un partido del equipo español masculino de baloncesto, uno de los deportes más seguidos, en La 2. No es por menospreciar a la cadena pero poder emitirlo en HD y no hacerlo nos remontaba por lo menos a Atlanta 96.

La realización tampoco ayuda. Esto no es culpa de RTVE, ya que los encargados de enviar la señal a nivel internacional es la OBS, un ente que pertenece al Comité Olímpico Internacional. Hay momentos en los que seleccionan imágenes sin contenido interesante mientras en el mismo lugar están ocurriendo cosas interesantes. Un criterio un poco dudoso. Pero ya que solo podemos disfrutar de las Olimpiadas cada cuatro años hay que quedarse con lo positivo. Los comentaristas españoles de cada deporte pueden gustar más o menos, pero lo cierto es que viven los Juegos Olímpicos con pasión e intentan transmitírnosla a los que estamos en casa. Lo de la ceremonia de inauguración debió ser un lapsus. Mención especial merecen Julia Luna y Javier Soriano durante la narración del oro olímpico de Mireia Belmonte en natación. Todavía queda esta semana para disfrutar de la Olimpiada. RTVE está a tiempo de solucionar el problema que genera con la programación. Esperemos que así sea. Sino, a este paso, ver los Juegos en las cadenas de la corporación tendrá que considerarse deporte olímpico.

stats