La Presidencia USA, por sufragio mundial

ESTAMOS ante la aparición de la gran esperanza para un mundo desesperanzado. La llegada del primer negro a la Casa Blanca es, lógicamente, un suceso de relevancia sideral, pero es que el momento que vivimos agranda esa importancia. Por primera vez, un hombre de raza negra manejará los designios del mundo y sólo cabe esperar que le dejen hacer su labor, que ya se sabe que el racismo es algo enquistado en el mundo en general y muy particularmente en los Estados Unidos de América. Ojalá que a este Mandela del primerísimo mundo no le hagan la vida imposible porque en su éxito va el de todos nosotros. Es más, en esa madrugada de vértigo en la que nunca peligró el triunfo de Obama, se nos venía a la cabeza una idea en que se mezcla lo utópico con lo pragmático. Y es que en vista de la dependencia que de él tenemos todos, todos deberíamos poder votar al presidente de los Estados Unidos de América.