La Policía Nacional ha imputado al menos siete violaciones consumadas o en grado de tentativa al adolescente de 17 años detenido la pasada semana. Estas siete agresiones sexuales habrían sido cometidas en un plazo de dos semanas, y todas ellas en las inmediaciones del Hospital Nuestra Señora de Valme. El menor presuntamente esperaba a sus víctimas en un solar que es utilizado como aparcamiento por el personal de este hospital y los familiares de los pacientes ingresados en el centro sanitario.

Allí abordaba a sus víctimas y las forzaba a mantener relaciones sexuales con él. Poco ha trascendido del modus operandi del agresor, ya que el caso continúa bajo secreto de sumario, de ahí que no se conozca si utilizaba algún arma para intimidar a las mujeres a las que asaltaba. En un principio sólo habían saltado a la luz pública dos denuncias, pero tras el trabajo de investigación de la Policía ha desvelado al menos otros cinco casos.

La primera denuncia conocida se interpuso el 1 de julio. En ella, una mujer de 52 años, hija de un paciente, denunciaba que fue abordada por el presunto agresor cuando se dirigía a su coche. El menor la habría obligado presuntamente a practicarle una felación. La víctima habría podido guardarse una muestra de ADN del presunto agresor sexual para luego facilitársela a la Policía.

La segunda denuncia que trascendió se interpuso el 8 de julio. En este caso la víctima fue una médico del hospital. Dos días después, la Policía detuvo a un menor residente en las inmediaciones del hospital como presunto autor de estas agresiones sexuales. La investigación ha sido llevada a cabo por el Servicio de Atención a la Familia (SAF), el grupo de la Policía Nacional especializado en este tipo de delitos sexuales. En apenas diez días, los agentes de esta unidad esclarecieron un caso que había generado una gran alarma entre los trabajadores del centro sanitario, que llegaron a concentrarse en señal de protesta por las agresiones.

Este presunto violador en serie, que habría sido reconocido por algunas de sus víctimas, aprovechaba siempre la escasa iluminación y la ausencia de seguridad del aparcamiento para cometer los abusos y agresiones sexuales. El delincuente se encuentra internado en un centro desde el 10 de julio.

Un nuevo violador en serie en Sevilla

La investigación de la Policía Nacional ha revelado que el menor de 17 años podría ser un violador en serie. En Sevilla ha habido varios casos de este perfil de delincuentes sexuales. El más conocido es el llamado violador del Fremap, un enfermero que trabajaba en esta clínica y tenía acceso a los datos de sus pacientes para luego desplazarse a sus casas y allí violarlas. Este hombre fue condenado a medio siglo de cárcel por agredir sexualmente a cuatro mujeres en el año 2004. En verano del año pasado, un ciudadano indio que trabajaba en un kebab del centro fue arrestado por cometer presuntamente dos violaciones en el casco histórico. Años atrás, hubo otro violador en serie en Bellavista, que abusó de dos mujeres en un hotel de este barrio.