Pildorado de semillas de girasol, la tecnología aplicada a la siembra

Un buen nacimiento para un buen resultado. Si se mejora la plantabilidad del girasol gracias a una semilla pildorada y nuevas materias activas, se mejora la eficiencia de la siembra y maximiza el rendimiento del cultivo.

Este objetivo es, desde el año 2012, uno de los grandes proyectos de la empresa Syngenta: el sistema Unistand. Se trata de un sistema que consiste en pildorar semilla de girasol. Pildorar consiste en recubrir una semilla de girasol convencional con una cobertura de harina de madera y otros compuestos.

Cuando pildoramos la semilla de girasol, lo que se consigue es una mayor uniformidad en la forma de la semilla y un tamaño consistente y de calibre medio.

En enero de 2012 Syngenta comenzó a trabajar en el departamento de I+D para desarrollar este proyecto Unistand. Dos años después, se pasó a una fase de ensayos más intensos en los que los departamentos de I+D y de Technical Support testaron este tipo de semillas en todos los ambientes para garantizar una perfecta adaptación a todas las condiciones de cultivo de las diferentes zonas. Durante estos años, no sólo se ha comprobado la adaptación del pildorado, sino que Syngenta ha trabajado intensamente para incluir nuevos tratamientos de semillas que aporten soluciones y ventajas para los agricultores.

En concreto, en Andalucía este año se han plantado sólo 3.000 hectáreas de Unistand como prueba de concepto. No obstante, para la campaña que viene, la previsión es de plantar alrededor de 22.000 hectáreas, lo que supone alrededor del 9% de la superficie del año del lanzamiento.

El pildorado en la semilla de girasol, aporta ventajas importantes para el agricultor como son:

-Una calibración más rápida, sencilla y segura de la maquinaria de siembra.

-Una mejor "fluidez" de la semilla dentro de la maquinaria.

-Una mayor seguridad y eficacia durante la siembra. Al tener una forma más homogénea, la semilla se adapta mejor a las sembradoras mecánicas y neumáticas que tienen los agricultores. En consecuencia las siembras son más homogéneas y se reducen tanto los golpes dobles como las marras durante la siembra.

-Es un fantástico vehículo para el tratamiento de semillas. Al ser un material hidrófilo, la aplicación de productos de tratamientos de semillas se hacen de una forma muy efectiva, reduce la emisión de polvo durante la manipulación y siembra y por lo tanto aumenta la seguridad de la manipulación para el agricultor.