De la Torre propone ahora en Limasa pluses de productividad para empleados

No está incluido en su programa electoral de cara a la cita electoral del próximo 24 de mayo, pero el alcalde de Málaga y candidato a la reelección del PP, Francisco de la Torre, sorprendió ayer con una nueva propuesta que mete de lleno a la controvertida empresa mixta de limpieza Limasa en campaña. Ahora, y en pleno debate sobre el futuro de la sociedad cuyo contrato actual expira en abril de 2017, ha lanzado la posibilidad de que los empleados cobren pluses de productividad como fórmula para contribuir a la mejora de la limpieza.

El reciente informe hecho público por la organización de Consumidores y Usuarios (OCU), en el que Málaga ocupaba uno de los peores puestos de las 60 ciudades analizadas, ha podido tener que ver con esta medida anunciada por sorpresa y que se mostró ayer seguro de que sería una cuestión bien vista por los vecinos, a los que también pidió mayor concienciación ante la necesidad de no ensuciar lo ya limpio.

Para justificar la propuesta, precisó que la idea de incorporar elementos de productividad en el sector público se la escuchó una vez al ex presidente socialista del Gobierno Felipe González, del que dijo que "comparto en gran medida esa forma de enfocar los temas". Para el alcalde, hay dos cuestiones que abordar en materia de limpieza, una en relación con "el trabajo que se haga para limpiar y baldear" y también en cuanto a "cómo conseguir una colaboración ciudadana que sea la más ejemplar posible".

En su opinión, "hay que generar una dinámica en la que los trabajadores estén estimulados para hacer las cosas lo mejor posible", y además señaló que "los ciudadanos acompañen ese esfuerzo conservando la limpieza lo máximo posible de modo que se cree un círculo virtuoso para que mientras más se limpie, más se conserva y mientras más se conserva más estimulados están a limpiar bien y a mantener bien las cosas".

En consecuencia, abogó por "el consenso y la buena voluntad" por parte de residentes y trabajadores. A su juicio, "éstos tienen que darse cuenta de que los vecinos, que pagan con sus impuestos los servicios municipales, tienen la aspiración legítima de ver que el dinero luzca, y los empleados tienen también el derecho a que su trabajo luzca y sea respetado". Pero el candidato del PP a la Alcaldía de Málaga capital reconoció, al respecto, que "no es algo fácil y no caben soluciones mágicas, sino que debe ser un esfuerzo continuado de ambas partes". No obstante, aseguró que su compromiso es liderar esa tarea, en tanto que "nos gustan los retos difíciles".

Pero la propuesta llama la atención en el escenario actual dado que precisamente a raíz de la negociación del último convenio colectivo con los trabajadores, y que dio a pie una huelga de limpieza de varios días en la Navidad de 2013, la paga de productividad que cobraban en enero fue suprimida para tratar de ajustar el recorte presupuestario de los últimos años.

Según De la Torre, el tema de la limpieza siempre "es complejo". En este punto, anunció su intención de duplicar los espacios de baldeo con agua subterránea, procedente de aparcamientos y zonas del metro, lo que "dará muchísima más calidad que con las cubas y, además, no se gasta agua de la red". También incidió el candidato popular en la necesidad de modernizar los equipos de limpieza, algo que, sin embargo, se abordaría en el nuevo escenario que se abra con el final en 2017 de la adjudicación del contrato.

Precisamente, sobre el futuro de Limasa, insistió en que no descarta ninguna fórmula -privatización, municipalización o empresa mixta- ya que "es un tema que necesita mayor reflexión, más datos y más información".

Los partidos de la oposición, PSOE e IU, demandan que la empresa sea municipalizada para reducir los costes que acarrea la empresa mixta de limpieza y que supone cada año 86 millones de euros a las arcas municipales. Sin embargo, el equipo de gobierno del PP prefiere esperar a que se acerque la fecha en la que vence el contrato con sus socios privados (FCC, Urbaser y Sando) para decidir cuál será el modelo de gestión de un servicio envuelto de polémica en los últimos años por los continuos conflictos laborales y las quejas ciudadanas sobre la limpieza de la ciudad.