El Aluminios Galisur ya es nuevo equipo de la Superliga 2 de voleibol. El proyecto de futuro del cuadro utrerano disfruta de un magnífico presente tras imponerse en las semifinales de la fase de ascenso al Molina Voley murciano por 3-1 (19-25, 25-19, 25-20, 25-14) en un partido en el que debió superar los nervios iniciales para remontar y convertir de esta manera el sueño en realidad.

Con un pabellón Vistalegre absolutamente entregado en el comienzo del choque, se dio la circunstancia por las normativas sanitarias lógicas por la Covid-19 que todo el público tuvo que abandonar el recinto a las 22:20 para que se cumplieran los horarios. Pero ni siquiera esto fue un contratiempo para que el Aluminios Galisur confirmara en el día clave la multitud de méritos acumulados durante todo el curso.

Ya son 23 triunfos en los 23 encuentros disputados hasta el momento y sólo resta la fiesta de este domingo (12:30) contra un CN Sabadell que también sufrió de lo lindo para imponerse por 3-2 al Universidad de Valladolid después haber estado contra las cuerdas y materializar de esta manera también el ascenso por parte de los catalanes.

Los hombres de Calafell y López consiguen su triunfo número 23 en los 23 partidos jugados

No era fácil la situación que se le presentaba a continuación al Aluminios Galisur. La presión era grande, pues no se podía fallar en el día clave y eso era un elemento que podía pesar mucho en la mente de los jugadores a menos que la situación se complicar. Además, los murcianos, que habían caído por 3-0 en los dos encuentros de la anterior fase en el mismo grupo que los utreranos, llegaban con unas horas más de descanso al no haber jugado en la mañana del sábado, lo que, en teoría, les otorgaba algo de ventaja.

El comienzo, además, no pudo ser más complicado para los hombres de Flavio Calafell y Dani López. El Molina Voley arrancó haciendo un verdadero partidazo, levantando balones increíbles en defensa y atacando también con mucho acierto. Esos aciertos conducían a los visitantes a que se anotaran el primer set por 19-25.

Pero el Aluminios Galisur no iba a desfallecer y guiado por sus dos líderes en la cancha, Chema Castellano y Sergio Bruque, comenzó a apretar para darle la vuelta a la situación. El segundo set también iba a ser reñido, pero acabó decantándose hacia el lado utrerano por un 25-19, algo que tranquilizaba los nervios y que ya servía para otear un horizonte mucho más esperanzador y acorde a la realidad.

El tercer parcial iba a ser decisivo para situar a uno de los equipos en ventaja y comenzó con bastante igualdad. Pero los utreranos, punto a punto, esfuerzo a esfuerzo, fueron inclinando la balanza a pesar de ese gran partido que estaba desarrollando el Molina Voley. Los murcianos llevaron al límite a los anfitriones en todo momento, pero finalmente un 25-20 figuraba en el electrónico.

Restaba el último esfuerzo y ya el cuarto set sí iba a tener mayores diferencias para que la fiesta fuera completa. El Aluminios Galisur se lo apuntaba con un claro 25-14 ante la desesperación de un Molina Voley que veía que su tremendo esfuerzo no tenía la recompensa ante un equipo utrerano que confirmaba una temporada perfecta con el tándem técnico comandado por Flavio Calafell y con Dani López como su mano derecha.

Al final, la fiesta en la cancha fue completa, el Aluminios Galisur, el Club Voleibol Utrera, seguía enorgulleciendo a todos los amantes del deporte en la localidad y ya tiene su plaza en la Superliga 2 para la próxima temporada. Resta la fiesta de mañana contra el CN Sabadell, pero es un día para ponerle la guinda a un pastel que ya sabe muy sabroso en una tierra de buenos dulces.