Se volvió el Betis Féminas de vacío de su visita a Bilbao. Allí esperaba el Athletic, un rival directo por los puestos altos de la competición, que terminó por llevarse el gato al agua gracias a dos goles. El primero llegó cuando el partido prácticamente acababa de comenzar. El segundo, con un penalti en la segunda mitad. Dos acciones que permitieron a las bilbaínas tomar una renta en el marcador que las béticas, a pesar de su afán por encontrar la portería contraria, no pudieron salvar. Recortaron con un gol en propia puerta, pero no lograron un nuevo tanto que les permitiera regresar a Sevilla con, al menos, un punto en la maleta.

Fue un encuentro con muchos matices, en el que las verdiblancas llegaron a ser capaces de competir de tú a tú con uno de los grandes equipos de la competición. No hay que olvidar que este equipo fue hace unos años campeón de la Primera División femenina, siendo el único plantel capaz de romper la hegemonía de Barcelona y Atlético en los últimos años. Y esto son palabras mayores.

Para vencer a esta clase de rivales es necesaria concentración absoluta desde el primer minuto y, también, una pizca de fortuna que se ha mostrado esquiva en los últimos encuentros. Ambos factores se dieron cita en el primer gol del Athletic. Minuto 2 de encuentro y una fallo en la defensa permitió a Azkona adelantar al equipo bilbaíno. Quedaba mucho por delante, claro, pero el lastre ya era importante.

Un gol que sentó como un auténtico mazazo a las béticas, que continuaron prácticamente dormidas durante el primer acto, en el que apenas hubo grandes ocasiones por ninguno de los dos bandos, si bien el dominio, principalmente, fue del equipo local.

Sí mejoró el Betis Féminas en la segunda mitad. Priscila puso a prueba a Ainhoa con un buen disparo y demostraba que, ahora sí, el cuadro de Antonio Contreras había entrado al partido. Pero un penalti señalado por manos de Marta Cazalla en el minuto 55 lastraba ese ánimo de remontada. Garazi se encargó de convertir la pena máxima y poner el 2-0.

El técnico bético trató de levantar al equipo con varios cambios y pronto lograron recortar distancias gracias a un tanto en propia puerta de Garazi. Con más de 20 minutos por delante, el Athletic se replegó ante un Betis que lo intentaba sin lograr un premio más goloso.