Además de la configuración de la plantilla del próximo año, Miguel Torrecilla tiene como tema prioritario el asunto del entrenador. Ahí aparece el nombre de Quique Setién, un viejo conocido suyo, con el que incluso ya negoció durante su etapa en el Celta y el técnico se sentaba en el banquillo del Lugo.

Tras la continuidad de Berizzo en el Celta y las dudas de Juande Ramos, el nombre de Setién es el preferido en el Betis. Ahora bien, el cántabro se encuentra pendiente de una reunión con el presidente de la Unión Deportiva Las Palmas, Miguel Ángel Ramírez, en la que aclarará su futuro, que aparece ligado al equipo canario por una cláusula que entró en vigor al obtener la permanencia. El máximo dirigente se encontraba de viaje la pasada semana, por lo que ese encuentro quedó aplazado a ésta y ahí es donde debe quedar fijado qué pasará con Setién. El técnico, siempre comprometido a su palabra, ha reiterado que continuará siempre y cuando se cumplan una serie de requisitos, no sólo económicos, en el proyecto.

Desde el club canario, mientras tanto, no se teme por la continuidad del técnico, aunque tampoco se da por cerrada su renovación. "Aquí no se quiere a nadie a disgusto, aunque no sea ahora el caso de Quique (Setién)", explicó una fuente del club al diario Canarias7, que además apuntaba que, llegado el caso, no hay establecida cláusula liberatoria alguna ni habría intención por parte de la entidad de pedir indemnización por su marcha.