El Betis Futsal no acaba de plasmar en el marcador la teórica mejoría registrada en su plantilla durante el pasado verano. El equipo de Juanito ha sufrido en la sexta jornada de la Primera División una nueva derrota al caer frente al Levante por 4-2 en un partido que se les puso muy cuesta arriba a los verdiblancos durante el primer periodo y el arranque del segundo.

Concretamente, a los 23 minutos el marcador registraba un concluyente 3-0 para los azulgranas gracias a los tantos de Maxi Rescia (8'), Pedro Toro (16') y Gallo (23'). Demasiada desventaja para un Betis Futsal que sí llegó a recortar las distancias muy pronto a través de un gol de Bocao (25').

A partir de ese momento el dominio visitante fue absoluto ante un Levante que le cedía la pelota sin ningún problema, pero el ataque no tenía excesivos problemas para Fede, que sólo tuvo que realizar alguna parada complicada en disparos lejanos de los hombres de Juanito, particularmente en uno de Rubén Cornejo.

El entrenador bético optaba ya en los tres últimos minutos por atacar con un portero jugador y situaba en esa posición a Joselito, incluso cuando el balón era recuperado por los levantinistas. En una de esas últimas acciones un defensa lanzaba un balón bombeado que no pudo ser despejado a córner por el futbolista gaditano, pues tras tocarlo con la mano se estrelló en el larguero y le cayó a Rubi para que hiciera el 4-1 con tremenda facilidad.

🪄⚽️ ¡𝐌𝐀𝐆𝐈𝐀! 🎥 Así ha sido el primero de hoy, obra de Maxi Rescia.#OrgullGranota 🐸💙❤️ pic.twitter.com/xsSHHdQjsr

— Levante UD FS (@LUDfutbolsala) November 13, 2021

La posibilidad de recortar distancias y, por tanto, de haber optado a una igualada en los minutos finales se había esfumado. El Betis Futsal sí tiró de orgullo para que Emi Buendía rematara con acierto un saque lateral con potencia al otro poste y dejara definitivamente todo en el 4-2 final.

Con Juanito enfrentándose ya con el tiempo cumplido con algunos aficionados que lo habían insultado a sus espaldas, la tabla clasificatoria empieza a amenazar a un equipo con sólo un triunfo, dos empates y tres derrotas cuando las expectativas eran mucho mayores ante de comenzar el curso con los refuerzos conseguidos.